J. M. Serrano
Tribunales

Se enfrenta a 4 años por matar a un joven durante una carrera ilegal en Nervión

El juicio, que debió celebrarse este viernes, fue aplazado para el mes de noviembre

Sevilla Actualizado: Guardar
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Juan Pedro Pérez tenía 31 años y era arquitecto. En la noche del 29 de octubre de 2012 circulaba en moto con su novia camino del centro de la ciudad cuando de manera repentina la muerte se lo llevó por delante en el cruce de la Avenida Francisco Javier con Eduardo Dato. Los conductores de dos coches de gama alta, un Audi A6 y un BMW, venían realizando una suerte de carrera ilegal por las calles de Nervión, a gran velocidad y zigzageando. Así lo contaría después un testigo de lo ocurrido, un trabajador de Tussam que vio cómo rebasaban el autobús de manera temeraria.

Al llegar a la citada intersección, detuvieron la marcha ante la señalización de un semáforo en rojo, pero el conductor del Audi quiso anticiparse y antes de que se pusiera en verde aceleró rápidamente.

En ese momento cruzaba Juan Pedro con su novia en la motocicleta. «Al verse sorprendido por la presencia del vehículo que interceptaba su trayectoria, no pudo más que frenar sin poder evitar la colisión con el lateral derecho del coche con tal violencia que perdió la vida en el acto». Así relata el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación los últimos momentos de vida de este joven sevillano, víctima presuntamente de graves imprudencias al volante.

El fiscal pide para el conductor del Audi A6, un joven vecino de las Tres Mil Viviendas que entonces tenía 21 años y que se llama José Benigno P. R., cuatro años y medio de cárcel por delitos de homicidio y lesiones por imprudencia, conducción temeraria y contra la Seguridad Vial. La Fiscalía, como las acusaciones personadas en el procedimiento, solicitan la pena máxima que en el caso de las imprudencias con resultado de muerte no supera los cuatro años. Una condena que se impone aunque la conducta delictiva cueste una o más víctimas. Como es el caso, en este accidente murió una persona pero resultó gravemente herida su pareja sentimental que salió despedida de la motocicleta. Su abogado, David Andana, reclama una indemnización de 44.463 euros además de la misma pena de prisión que el fiscal.

Sólo transcurrieron seis meses desde que el acusado cumplió 18 años y Tráfico le quitó el permiso

José Benigno P. R. no se dio a la fuga cuando chocó contra la moto. Pero no debía haber estado al volante esa noche. Tenía retirado el carné por las numerosas infracciones que había cometido desde el primer día que consiguió el permiso. El acusado cumplió la mayoría de edad en marzo de 2009 y el 9 de septiembre de ese mismo año, la Jefatura Provincial de Tráfico iniciaba el expediente de retirada del carné. Una perdida que se consumaba en tiempo récord, en medio año.

Utilizó a su padre fallecido

Durante el procedimiento, el acusado aseguró que no sabía que le habían retirado el carné porque la resolución le había llegado a su padre, esgrimiendo un recibí donde constaba el nombre y apellido del progenitor, el DNI y «un garabato». La Fiscalía lo acusa de haber usado los datos de su padre, que había fallecido cuatro años antes, para no darse por enterado de la orden de Tráfico y firmar por él ese acuse de recibo.

La investigación no pudo dar con el conductor del BMW. Los agentes rastrearon las Tres Mil Viviendas en busca de una pareja que esa noche había quedado para ir al cine con el acusado. Pero las pesquisas no dieron resultado.

El juicio debió celebrarse ayer en el Penal 5. Sin embargo fue aplazado para el próximo 30 de noviembre por incomparecencia del letrado de la defensa.

En los asfixiantes pasillos del edificio Noga, los familiares de la víctima se vieron obligados a cruzarse sin apenas espacio con los del acusado, que se encuentra en libertad. Antonio Pérez, padre de Juan Pedro, vestido de resignación, no podía aguantar la emoción si lograba encadenar unas cuantas palabras. Acababa de conocer que tenía que seguir esperando. «Tan sólo queremos que esto acabe ya».

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