Una de las carrozas dela Cabalgata
Una de las carrozas dela Cabalgata - juan flores

Luces y contraluces de la Cabalgata de Reyes Magos de Sevilla 2015

Los comentarios generalizados al paso del cortejo fue el buen ritmo que llevaba aunque, también, algunas críticas a la excesiva presencia de mayores en las carrozas

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Lo de llamar a Antonio o a María al paso de las carrozas por si cuela está muy visto. Ahora lo que se está poniendo de moda es la señora que lleva la escoba para recoger los caramelos que se han quedado más allá de la valla, en la salida. Algo que ya no se ve tanto, gracias a Dios, es lo de llevar el paraguas y ponerlo al revés para pescar todo lo que echen. Es que claro, llevar el paraguas mientras, al mismo tiempo, intentas sacar el móvil, desbloquearlo –si lleva huella dactilar mucho peor–, encontrar el iconito de la cámara, sacar la foto sin flash, intentar hacer un vídeo a cámara lenta de cómo el niño gracioso vestido de indio te intenta dar con el caramelo en el ojo… Mejor dejamos el paraguas en casa.

¿Y la sillita de los chinos de la Semana Santa? Pues también es incompatible. El que suscribe no vio ni una silla de los chinos. ¿Es que no hay personas mayores viendo la Cabalgata? ¿Es que no había nadie que le doliera la espalda tanto como para estar de pie, «por lo menos», una hora a que pase el cortejo?

Seguro que más de uno está ahora maldiciendo por haberse puesto sus zapatos favoritos y ahora tiene la suela pegajosa. Pues bien, ya hay quien ha encontrado la solución, y no es precisamente ponerse dos bolsas en los pies, que también está muy visto. Esto no se ve. Se trata de pegar cinta aislante en la suela, de forma que cuando usted llega a casa, la retira, y adiós caramelos.

La gente opina

En cuanto a los comentarios del público, los Reyes Magos este año fueron sosos para algunos, divertidos para otros. Como siempre. Eso sí, Juanito y Marchena se movían menos que algunos palios en Semana Santa. Ese fue uno de los comentarios generalizados. Los béticos, gritándole al gaditano; los sevillistas, al de Las Cabezas, y ellos casi ni se inmutaban.

Igualmente, otra de las conversaciones de este año, que se está poniendo de moda últimamente, es aquello de que la Cabalgata es para los niños y que casi hay más mayores que pequeños en el cortejo.

El nivel artístico de las carrozas también es algo muy recurrente. Hay quien le parece todo muy cutre y hay también quien ve mejoras en los últimos años. Había carrozas muy vistosas, como la de los Mayas, y otras bastante más simples, como la de la Federación Andaluza de Fútbol.

A buen ritmo

Lo que está claro es que el ritmo que ha impuesto el Ateneo a la Cabalgata en los últimos años está siendo más que correcto. Ya no hay esos descuelgues y cortes entre las carrozas, ni esos retrasos que tan molestos son cuando alguien espera con niños la llegada de los Reyes. Ahora todo va compacto, a un ritmo adecuado. El cortejo tiene una medida justa, no se hace ni corto ni largo.

Sin embargo, no todo estaba controlado. La aplicación de la Cabalgata, que tan útil resultó el año pasado, para los que tenían el teléfono de la manzanita no se actualizó, y el del iPhone se hacía un verdadero lío porque no le cuadraba el orden de las carrozas. Pero, ¿desde cuándo es necesario el GPS para ver pasar un cortejo?

Hablando de móviles. Se presiente ya la moda de la próxima Semana Santa: es el regalo de las Navidades, el del amigo invisible… Se trata del palo para hacer «selfies». Si no, esperen a ver dentro de 80 días, que esto ya está aquí, que le hemos visto la espalda al Rey Negro.

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