V. ALTOUNIAN/ SCTM

Confirman el beneficio de la oxitocina en algunos síntomas del autismo

Un estudio en ratones muestra que la terapia con esta hormona mejora el comportamiento social de los animales

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Desde hace tiempo se sospecha que la oxicitocina, la llamada ‘hormona del amor’, puede tener un papel en el manejo de algunos síntomas relacionados con el trastorno del espectro autista. Y, al menos en ratones, parece que la oxitocina puede mejorar el comportamiento social, un beneficio que puede llegar a ser de larga duración con un tratamiento oportuno.

La oxitocina es una hormona que ayuda a construir los lazos sociales y la confianza en animales, aunque los ensayos clínicos realizados hasta la fecha han dado resultados mixtos. Para entender cómo funciona la hormona en el cerebro, los investigadores de la Universidad de California-Los Ángeles (EE.UU.) fabricaron un ratón transgénico con una forma genética de autismo gracias a la supresión de un gen, lo que causo un síndrome hereditario de desarrollo que incluye trastorno del espectro autista.

Así, pudieron ver que cuando se trataba a los ‘ratones autistas’ con oxitocina, mejoraba su comportamiento, y eran capaces de interactuar más tiempo con otros ratones. Además los investigadores vieron que los cerebros de ratones con autismo tenían niveles más bajos de la hormona que era producto de una menor cantidad de neuronas productoras de oxitocina.

Desarrolo del cerebro

Para probar si podían influir en los ratones durante el desarrollo temprano cuando los circuitos neuronales están en formación, los expertos, entre los que se encuentra la investigadora española Olga Peñagarikano, trataron a los ratones autistas con dosis diarias de oxitocina poco después de nacer. Y vieron que el tratamiento temprano producía beneficios duraderos en sus habilidades sociales, que se mantenían más de una semana después de suspender el tratamiento.

Los resultados parecen apoyar la exploración de la oxitocina como tratamiento para algunas formas de autismo y sugieren además un periodo ‘ventana’ crítico en el que el tratamiento temprano podría ayudar a restaurar la sociabilidad. La investigación se publica en « Science Translational Medicine».

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