MORÓN DE LA FRONTERA

Antonio Castro: «Hay que hacer de la poesía algo accesible»

El poeta y cantante moronense vuelve a la palestra con su recopilatorio de poesías «Navegante de Sueños»

El poeta Antonio Castro, durante la presentación de su obra J. L. M.

JUAN LUIS MÁRMOL

No es algo habitual descubrir talento en una afición . Son muchos los casos de personas que, cuando vuelve a casa después de sus jornadas de trabajo como camareros, banqueros, dependientes o chóferes, dedican su tiempo libre a determinadas artes que se guardan para sí. Algunos hacen miniaturas que adornarán su despacho o lugar de trabajo, otros se lanzan a componer canciones para fiestas particulares; pero la gran mayoría saca siempre a ese escritor que llevan dentro .

Quizá el hobby más «asequible», que solo requiere lápiz y papel . Son muchos los casos, como se ha dicho, pero pocos los que se atreven a sacarlo a la luz, en varias ocasiones más por descubrimiento ajeno accidental que por la propia voluntad de mostrarlo. Y en esos raros instantes, se encuentran verdaderas sorpresas.

El caso de Antonio Castro podría ser uno de estos casos si se obvia que su trabajo principal es el de músico en el grupo Azotea. Pero lo que nadie esperaba (ni el propio Antonio) era que aquel guitarrista y cantante tuviese alma de poeta .

Empezó compartiendo sus creaciones en su muro de Facebook y, con una velocidad vertiginosa, el éxito llamó a su puerta en forma de «likes» y compartidos, tanto por sus contactos como por usuarios internacionales de diversos foros de poesía.

Este éxito le animó a publicar su primer libro, «Antología de Poemas y Textos… y un Par de Canciones» en junio de 2016. Autopublicado, editó más de un centenar de copias que se vendieron en muy poco tiempo.

Segundo libro

Un año largo después, Castro regresa a las librerías, esta vez con la editorial Sé Leer, para publicar su segundo libro en solitario … y su quinto trabajo, tras participar en antologías para grandes editoriales argentinas (Dunken y Croupier).

«Estoy bastante sorprendido», admite Castro, especialmente en lo que se refiere a su gran mercado argentino, pero también con esta trayectoria. «Me está yendo muy bien, la verdad», explica Antonio, incluso a pesar de lo complicado que es el mercado de la poesía en España . Pero desde que se aventurase con su primera antología, las cosas no le han ido nada mal en este año.

Un tiempo de ensueño que continúa como «Navegante de Sueños», el sugerente título de su libro. «Espero que me vaya, al menos, como el año pasado, aunque incluso con menos también me conformo», confiesa. Todo esto no ha hecho que se le suba a la cabeza, ni muchísimo menos. Incluso, a pesar de todo lo que ha demostrado, sigue manteniendo cierta cautela .

«Yo entiendo que lo del año pasado fue un poco la novedad», aunque eso no implica que se sienta orgulloso de lo que ha logrado . «Mucha gente me anima a seguir escribiendo, me preguntan cuándo voy a sacar más libros».

Popular en las redes sociales

¿Cuál es el secreto de su fórmula? En su primera publicación ya habló con ABC y comentó una idea que vuelve a repetir en esta entrevista: el fácil acceso de su poesía para todos los públicos . Si bien Castro sabe, gracias a su formación musical, de la importancia de las estructuras, él escribe de forma clara y directa.

Algo que parece sencillo, cuando en realidad entraña mucha dificultad, pues si difícil es expresar en el lenguaje diario lo que uno siente , ponerlo en verso y en su propio estilo lo engrandece todo. «Hay que hacer accesible la poesía».

Pero, además, ha encontrado en las redes sociales un gran impulso para su carrera. Gracias a ellas pudo encontrar su mercado en Argentina y gracias a ellas puede vender su obra. «Mucha gente me ha pedido libros a través de mi Facebook particular, y yo he vendido mucho por ahí», confirma.

Respecto a las expectativas con su «Navegante de Sueños», Antonio Castro piensa que «será mejor. Yo nunca pensé que volvería a escribir después del primer libro , porque era más sacarme una espinita que tenía dentro, pero esto engancha muchísimo».

Aunque admite que sigue siendo un «aprendiz de la palabra» y que le queda mucho por dominar, sí se comprueba una clara evolución en sus trabajos, mucho más depurados y más personales. Por ello, este navegante que ya zarpa por los sueños del poeta avanza con firmeza y con la misma ilusión que el autor imprime en cada verso de su repertorio. Y a este le queda mucha cuerda.

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