BMW

Los turistas rusos prefieren descapotables para viajar por España

Este tipo de vehículos se pueden usar durante las cuatro estaciones del año

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Sentir el calor del sol y la brisa en la cara, mientras conduces un descapotable al lado del mar, puede ser un plan muy atractivo para los viajeros que recorren la costa española durante los meses de julio y agosto.

Los turistas rusos que veranean en España son los usuarios con mayor demanda de descapotables, según las estadísticas que maneja Centauro Rent a Car. De todos modos, este tipo de vehículos deportivos cuenta también con una gran acogida entre franceses, italianos y clientes nacionales. Como curiosidad, los turistas rusos que se encuentran en nuestro país no solo conducen descapotables en verano, disfrutan con el alquiler de este tipo de coches durante todo el año. Incluso en invierno.

Básicamente hay dos tipos de descapotables.

Aquellos que llegan con una capota rígida de metal articulable y de accionamiento completamente eléctrico –en algún caso y para aligerar peso de aluminio–, y aquellos más tradicionales que mantienen una capota de tela. Pero hay al menos otros dos tipos menos comunes que también pueden presumir de ser "cabrios". Unos son los que pierden una parte del techo desmontándolo pero manteniendo la estructura como el Porsche 911 Targa. Y aquellos que también mantienen la estructura pero lo único que se abre es una parte del techo mediante una capota de tela que queda enrollada en la parte trasera. Las razones para elegir una u otra son múltiples y tienen que ver más con el peso del propio coche –los cabrios son siempre más pesados– que con otras apreciaciones estilísticas.

Aunque podríamos pensar que en nuestro país se venderían muchos cabrios o descapotables por las horas de sol y luz, las cifras de ventas reales nos desmienten sin remedio. Ni siquiera en los análisis realizados mes a mes por las asociaciones de fabricantes figura este segmento de forma diferenciada, y sus cifras de matriculaciones se incluyen en las de sus "hermanos" cerrados. Pero tiene su lógica. En primer lugar los descapotables son en general mucho más caros que sus versiones cerradas y hasta hace pocos años eran básicamente versiones de dos plazas, por lo que quedaban eliminadas todas aquellas parejas con hijos. El descapotable tenía que ser el segundo coche, nunca el principal de la casa.

La otra razón de peso es el sol o el calor. Puede convertirse en un gran problema permanecer bajo el "implacable Lorenzo" sin movernos, detenidos en un semáforo o en medio de un atasco. Viajar, incluso en pleno verano, no es incómodo siempre que el coche tenga aire acondicionado y no nos encontremos con una retención. Aunque en ese caso lo más inteligente –y no tiene por qué suponer ningún problema– es poner la capota y esperar mejores circunstancias. Además, las capotas de tela de casi cualquier cabrio aíslan perfectamente a los pasajeros y están fabricadas con varias capas de distintos materiales protectores. Incluso fabricantes como BMW, Mercedes, Porsche o Audi, por citar algunos ejemplos, ofrecen capotas más sofisticadas, con hasta 5 capas superpuestas de materiales aislantes y absorbentes de ruidos y los mecanismo de apertura y cierre de la capota suelen ser automáticos o, como mucho, con alguna pequeña intervención manual.

Hasta hace unos años los descapotables pecaban, además, de ser poco seguros en caso de vuelco, pero ya desde hace tiempo la mayoría de ellos cuentan con unas barras antivuelco invisibles –en algunos coches de diseño retro, éstos arcos de seguridad sí son visibles– que se despliegan en cuanto el coche siente una pérdida fuerte de adherencia, por lo que la seguridad no queda comprometida. Además, prácticamente todos llegan con los mismos sistemas de ayuda y asistencia al conductor que las versiones cerradas. Y respecto a los amigos de lo ajeno, tampoco debería haber mucho problema salvo que el "caco" se empeñe en pasar un buen rato trabajándose las múltiples capas de diferentes tejidos.

La compañía Centauro de capital 100% español cuenta ya con tres flotas de descapotables, de varios modelos, para disfrutar a tope del buen tiempo en la temporada estival: Opel Cabrio, Audi A3 Cabrio y Fiat 500 Cabrio. El modelo de la marca italiana ha sido el último incorporarse a la flota de Centauro Rent a Car para satisfacer las necesidades de los clientes que buscan un coche más pequeño y con un precio más económico, dentro de la gama de deportivos.

Ver los comentarios