Evita averías en el coche por las altas temperaturas

Para muchos españoles el verano ha llegado a su fin, pero las temperaturas se empeñan en demostrarnos que esta estación sigue viva. En numerosas localidades se están superando los 40 grados, lo que puede ser un problema si no se presta la atanción a determinados elementos mecánicos.

Uno de esos elementos, y quizás los que más sufren con las altas temperaturas son los neumáticos. Conviene controlar su estado, sobre todo si no se ha realizado una revisión de los mismos al inicio del verano, y vigilar especialmente la presión de las ruedas con el fin de evitar pinchazos.

Según los especialistas de Eurotaller, con el calor el radiador sufre en exceso, por lo que es importante revisar de forma periódica los niveles de líquido refrigerante.

Revisa el aire acondicionado y el sistema de refrigeración del vehículo. Cualquier fuga de refrigerante puede provocar que el motor se caliente lo suficiente como para provocar una seria avería.

Recuerda que un elemento tan simple como un parasol ayuda a que el coche sobrelleve mejor el calor. Colócalo en el parabrisas al aparcar para que la temperatura interna baje hasta 10 grados. Al volver a acceder notarás una temperatura más amigable, evitarás gastar combustible forzando la climatización y también un desgaste prematuro de ajustes, plásticos y revestimientos de a bordo.

El sistema de frenos, que normalmente está expuesto a altas temperaturas, sufre también por el calor, pudiendo afectar a los discos e incluso a los latiguillos del freno.

Por último, hay que prestar especial atención a no dejar objetos dentro del coche expuestos al sol, como mecheros, espejos o elementos inflamables. Un mechero a altas temperaturaspuede explotar y ser causa de un accidente o provocar quemaduras si en ese momento hay personas en el interior del coche. En el coche siempre llevaremos para ir bien hidratados y evitar golpes de calor. Además, la sgafas de sol son indispensables para una conducción segura la mayor parte del día.