El nuevo Mercedes SLC, desde 45.250 euros

Mercedes-Benz pone a la venta su nuevo roadster biplaza SLC, desde 45.250 euros. Sucesor del afamado descapotable compacto SLK, llega al hilo del vigésimo aniversario del lanzamiento de éste, con más de 670.000 unidades vendidas.

La nueva denominación, SLC en detrimento de SLK, obedece a la estrecha relación del recién llegado con la última Clase C en la marca germana, de la que toma buena parte de la tecnología aplicada.

La versión más potente es el Mercedes-AMG SLC 43, de 367 CV, y la básica el SLC 180, de 156 CV. Entre ambos, hay un SLC 200 (184 CV), el diésel SLC 250d (204 CV) y SLC 300 (245 CV). Asocian cambio automático 9G-TRONIC, salvo para los 180 y 200, en los que es opcional (equipan caja manual de 6 velocidades).

A su vez, las versiones SLC 300 y SLC 250d montan de fábrica Dynamic Select, que permite modificar el reglaje de motor, cambio y dirección según las preferencias del conductor entre los programas Confort, Sport, Sport+, Eco e Individual.

Más agresivo

Frente a su antecesor, el nuevo SLC exhibe una imagen más deportiva. Para ello, se dota de una nueva parrilla con la estrella de la marca integrada, faldón más agresivo con entradas de aire de mayores dimensiones, y una nueva firma lumínica. En la zaga los cambios son menos profundos.

Por lo que toca a la seguridad, equipa servofreno de emergencia Collision Prevention Assist Plus, que combina una advertencia óptica de distancia y otra acústica de colisión con un servo de emergencia adaptativo ideado para evitar colisiones, reforzando la acción de frenado del conductor si la situación lo requiere. De persistir peligro de colisión sin reacción del conductor, el sistema puede efectuar una frenada autónoma.

El SLC equipa un mejorado techo duro retráctil, con un plegado más sencillo operativo en plena marcha hasta 40 km/h. Para hacer más confortable la conducción a cielo abierto y con bajas temperaturas, los asientos son calefactables y en los reposacabezas recibe sistema Airscarf, que proyecta aire caliente a la altura del cuello. Y para evitar turbulencias en el habitáculo, existe la opción del paravientos.