El plan 'Dinamo' tiene como objetivo aumentar las ventas de los comercios de los cascos urbanos. :: O. C.
Ciudadanos

Diputación inicia un plan cultural para revitalizar el comercio

El proyecto 'Dinamo' va dirigido a 37 municipios de la provincia y está concebido para estimular la economía local

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La Diputación iniciará a finales de julio el desarrollo del proyecto 'Dinamo', planteado para dinamizar la actividad comercial de 37 municipios de la provincia con población inferior a 50.000 habitantes.

Las acciones programadas, de naturaleza cultural y de ocio, están concebidas para atraer visitantes y estimular la actividad económica, destinándose a los cascos urbanos donde se asienta el comercio tradicional. El presupuesto de esta iniciativa ronda los 850.000 euros.

'Dinamo' es un plan que ha requerido la cooperación de diferentes ámbitos de Diputación: Turismo, Cultura y Empleo, tres sectores que se engloban en el área de Desarrollo Económico. En la elaboración de este programa también colaboran los ayuntamientos y la Federación de Comerciantes Fedeco.

Este nuevo proyecto forma parte del Plan Provincial de Promoción Económica Cultural, con vigencia hasta el año 2015 y con una dotación económica de 11,5 millones de euros. Asimismo, está consignado en el Proyecto Integral de Desarrollo Local y Urbano, gestionado por el IEDT y financiado con fondos europeos FEDER y recursos propios de Diputación.

El proyecto 'Dinamo' estará en vigor durante cuatro meses, desde finales de julio hasta los últimos días de octubre. Las acciones planteadas pretenden conformar una imagen colectiva de los comercios urbanos, hacerlos más competitivos y estimuladores de actividad económica.

La Diputación, que concibe la cultura y el turismo «como una inversión, no como un gasto», confía en que esta iniciativa «haga saltar la chispa que necesitan los municipios de la provincia, aprovechando las relaciones entre turismo, cultura y comercio».

El programa se desarrollará en las localidades de interior de La Janda y la Sierra durante los meses de julio y agosto, buscando estimular la oferta de estos municipios en su particular temporada baja así como ofrecer propuestas complementarias al turismo de costa; mientras que en septiembre y octubre se realizarán las actividades en las poblaciones litorales, justo cuando la afluencia de turistas se empieza a resentir.