Cadena de montaje en la factoría de Alestis en El Trocadero. :: A. V.
CÁDIZ

Alestis aborda una dura restructuración interna para poder cumplir con Airbus

Los nuevos consejeros preparan a contrarreloj un plan de saneamiento económico y de mejora de los recursos que no descarta futuros ajustes de plantilla

C Á DIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La compañía aeronáutica Alestis se enfrenta a una dura reconversión interna para garantizar su futuro y evitar un efecto dominó en el resto de las industrias auxiliares. El gigante de la aviación civil Airbus está seriamente preocupado con los problemas estructurales y financieros que arrastra esta empresa, participada con capital público andaluz, desde su creación en 2009 y teme que el cúmulo de contratiempos acabe finalmente por perjudicar a los contratos que mantiene con ella. No hay que olvidar que Alestis nació como suministrador principal (Tier-1) de Airbus y participa de lleno en el nuevo proyecto de avión A350 con la construcción de su cono de cola y de la 'belly fairing' o panza. Alestis tiene un especial calado en la Bahía al contar entre Puerto Real y El Puerto con cuatro de sus nueve plantas.

La dimisión el pasado 23 de marzo de su consejero delegado, Gaizka Grajales, ha sido el final de una etapa marcada por la incertidumbre en los plazos de entrega. En los círculos aeronáuticos se da por hecho que el presidente en España de Airbus Military, Domingo Ureña, fue quien forzó la salida de Grajales para reorientar la dirección de Alestis. Ahora queda un trabajo a contrarreloj para recomponer la empresa y hacerla más competitiva. El 16 de abril entraba un nuevo consejo de administración, encargado de poner orden. Uno de los consejeros independientes propuesto, precisamente, por el Grupo Alcor, que goza de la mayor parte del accionariado de Alestis, es Manuel Hita, un laureado ingeniero que fue director general de Airbus España. Además, el nuevo consejo cuenta con José Luis Galán, otro consejero independiente propuesto por la parte financiera. Ambos son los cerebros para reflotar a Alestis tanto en el plano técnico como económico.

Es incuestionable que dos años después de su constitución, Alestis no goza de buena salud. El gran proyecto aeronáutico de la Junta de Andalucía para contar con un proveedor de primer nivel (Tier-1) en la comunidad no ha logrado superar la primera fase del plan estratégico, por lo que se ha visto obligado a presentar preconcurso de acreedores. Su deuda financiera en 2010 ascendía a 160 millones de euros.

Las primeras decisiones que tomó el nuevo consejo fue la autorización de la declaración de preconcurso de acreedores para renegociar la deuda con los proveedores en un plazo máximo de cuatro meses. La segunda fue la creación de un equipo técnico para reorientar y mejorar las cadenas de producción.

Airbus ha mirado siempre con recelo los movimientos de Alestis. El pasado verano aterrizó en la empresa el ingeniero Juan Calero, procedente de la factoría de Airbus en Getafe. Calero fue nombrado director de Operaciones de Alestis y encargado de hacer una primera radiografía de la situación. Las primeras conclusiones apuntan a la imposibilidad técnica de afrontar con holgura contratos tan complejos de Airbus como el diseño y construcción del cono de cola del nuevo A350. De hecho Airbus ha colocado en los dos últimos meses a una docena de sus ingenieros en puestos clave de Alestis para mejorar los procesos. LA VOZ ha podido saber que el presidente de Airbus Military, Domingo Ureña, mantuvo ayer un contacto con ejecutivos de la cúpula de Alestis. El propio Ureña reconoció ayer que la situación de la empresa, si no se ataja de inmediato, puede producir «un duro quebranto no solo a Airbus sino al resto de la cadena aeronáutica».

Los hilos que mueve ahora el nuevo consejo de administración consisten en optimizar y racionalizar los recursos de la empresa y la estrategia pasa por un ahorro de costes y un ajuste en sus centros de producción, aún no definidos. Alestis cuenta con 9 plantas en España (2 en Vitoria, 4 en Cádiz y tres en Sevilla), además de dos en Brasil. Su plantilla está formada por 1.800 trabajadores.