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Héroes caídos

El médico de 'Perdidos' la emprende a golpes con la conductora de un autobús que no le dejó subir al vehículo porque iba borracho

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Ay el bueno de Jack... ¡Menudas pulgas gasta! Matthew Fox acaba de interpretar el peor papel de su vida. El protagonista de 'Perdidos' tendrá que dar cuentas al juez por agredir a una conductora de autobús que le negó el acceso a su vehículo. La mujer asegura que el pasado 27 de agosto el médico de 'Lost' intentó subir a un 'bus party' en Ohio (Estados Unidos) después de tomar unas cuantas copas, pero que no tenía invitación. «Él simplemente me miraba con la boca abierta, sin decir nada, así que le dije: 'Tienes que irte, amigo. Te estás colando en mi autobús'». Entonces, cuenta la conductora, Fox comenzó a golpearla en el pecho y en la entrepierna y ella respondió con un puñetazo en la boca que le causó un corte en el labio. El actor, que estaba completamente borracho, alega en su defensa que, lejos de continuar la fiesta en el autobús, solo pretendía que le llevaran de regreso al hotel (no debió explicarse bien). Y esto será lo que defienda delante del juez cuando le citen, porque a la mujer le importa un pito que fuese el bueno de 'Perdidos' o que el público le adore. Ella le ha puesto una demanda.

En el mismo banco de acusados en el que se sentará Matthew Fox se han sentado antes otros héroes de la pantalla convertidos en canallas. El que más experiencia tiene en liarla una y otra vez es Charlie Sheen. El actor mejor pagado de la tele no ha sabido jugar su papel de padre ni el de marido. Denunciado por su esposa, a la que dicen que llegó a poner un cuchillo en el cuello el día de Navidad, ha perdido la custodia de los pequeños y le han despedido del trabajo (era el protagonista de la serie 'Dos hombres y medio'). No es el único héroe caído, que fuera de la pantalla no son esos hombres aguerridos ni esos galanes que enamoran. Miren a Mel Gibson, denunciado también por supuestas agresiones a su expareja; y a Nicolas Cage, que el pasado abril también supo lo que es dormir en el calabozo después de ser arrestado por violencia doméstica y desórdenes públicos. Está claro que en la pantalla parecían mucho más grandes...