Un preso se escapa de Puerto II saltando la valla de seguridad

Un preso del centro penitenciario Puerto II se ha dado a la fuga saltando la valla de seguridad desde la cubierta de la prisión. El recluso responde al nombre de Rafael Pérez Carrillo y cumple una condena por tráfico de droga. Los funcionarios de Puerto II se percataron de la ausencia de este hombre cuando hacían el recuento rutinario en la tarde del pasado jueves. Fue en torno a las 21.30 horas cuando, tras cotejar los datos y buscar al preso por las instalaciones del centro, descubrieron un vídeo de las cámaras de seguridad donde se veía cómo el presidiario lograba salvar la valla desde el tejado para acceder al perímetro de seguridad y luego alcanzar el recinto exterior saltando la segunda reja.

Aún se está investigando cómo el preso consiguió llegar a la cubierta de la prisión y si fue ayudado por algún compañero en su escalada. Aunque todavía no se conocen los detalles de la huida, todo parece apuntar a que el fugitivo tenía estudiada su escapada. Según fuentes consultadas por este periódico, las alarmas de seguridad saltan al detectar el movimiento de los funcionarios cuando estos pasean cerca por el perímetro. El prisionero pudo calcular la jugada y aprovechar el momento en el que la alarma se activó aquel día por este motivo para saltar hacia fuera sin llamar la atención y sin que nadie se diera cuenta. El fugitivo cumple una pena por tráfico de drogas y estaba interno en el módulo cuatro, destinado a los reincidentes.

Rafael Pérez tiene 29 años de edad y no llevaba muchos años interno, como han podido confirmar las mismas fuentes. No se trata de un recluso de comportamiento peligroso. La investigación ya está abierta y hasta el momento todo son hipótesis y conjeturas a la espera del informe definitivo que revele qué ocurrió para que este hombre pudiera huir sin levantar ninguna voz de alerta.

Accidentes penitenciarios

Hace pocos días otro suceso ocurrido entre presidiarios saltaba a la opinión pública, este ocurrido en Puerto III, donde un recluso resultó muerto a golpes tras protagonizar una pelea con otro interno cuando ambos disfrutaban de las dos horas de patio que les correspondía según el régimen al que estaban sometidos.

Esta es otra investigación que también permanece abierta para esclarecer las causas del enfrentamiento y determinar cómo pudo suceder en pleno patio del centro penitenciario.