Tal y como estaba previsto, el consejo de gestión de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) dio ayer luz verde a un proyecto para la remodelación del Mercado de Abastos cuyo plazo de ejecución queda fijado en cuatro meses, por lo que resulta más que probable que las obras se prolonguen hasta finales de año. A pesar de que ya está en marcha el expediente de contratación de los trabajos, su fecha de inicio sigue siendo una incógnita, toda vez que el Ayuntamiento aún espera la publicación en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) de la subvención de la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte que sufragará el 50% del coste total de esta actuación.
Al delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol, le tocó ayer comentar éste y el resto de temas tratados en el consejo de gestión, confiando en que ese último trámite burocrático pueda solventarse «cuanto antes». Crisol recordó que la reforma afectará principalmente a la nave del pescado, donde serán demolidos los 41 puestos y sustituidos por otros nuevos, prefabricados en acero y dotados con todos los servicios, conforme a las sugerencias de los propios comerciantes. Esta intervención, junto al cambio de la solería, las canalizaciones y la rehabilitación de las cubiertas, cuenta con un presupuesto de 1.497.039,03 euros, algo más elevado respecto a la cifra inicialmente prevista tras la inclusión de las propuestas del colectivo afectado, según Crisol.
Otros 286.807,98 euros invertirá el Ayuntamiento en la instalación provisional de los puestos de pescado en la calle Doña Blanca. El proyecto, aprobado ayer por la GMU, consistirá en la instalación de una carpa de 450 metros cuadrados «dotada con todo lo necesario» para la ubicación de las tiendas. La licitación de esta actuación comenzará «de inmediato», según el delegado, quien calculó que la empresa adjudicataria podrá estar seleccionada en el plazo aproximado de «un mes».
Dudas
La incógnita sobre el inicio de los trabajos provocaron ayer las primeras críticas en la oposición. El Partido Popular advirtió que «probablemente las obras no estarán concluidas antes de fin de año, con el consiguiente perjuicio para los comerciantes, que en ningún caso desean que lleguen las fiestas de Navidad y el mercado esté en obras. Para los populares, resulta significativo que «se tenga previsto el alquiler» de las carpas del pescado «por seis meses».
Así las cosas, el PP no descarta la posibilidad de que a los comerciantes «no les interese que las obras comiencen con tanto retraso y prefieran esperar al año próximo».
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