El enemigo es la baja participación. José Luis Rodríguez Zapatero no considera ni al PP ni a ERC capaces de aguar con su «no» la fiesta que, según él, celebrarán los catalanes mañana domingo. El «sí» está fuera de peligro, pero el jefe del Ejecutivo sabe que ambas fuerzas aprovecharán la pasividad de los ciudadanos para deslegitimar el nuevo Estatuto. Con un claro afán de calentar el ambiente, recurrió incluso a la guerra de Irak para reclamar un «sí masivo» al proyecto. «Pido a los catalanes -dijo- que no engorden el no de la crispación, de la falta de respeto a Cataluña y del autoritarismo que representan sectores de la derecha del PP».

El secretario general del PSOE se encontró en el Polideportivo de la Mar Bella de Barcelona a un público numeroso -alrededor de 5.000 personas- y entregado. Pero su mensaje iba dirigido a otros, a ese porcentaje que según las encuestas aún duda si merece la pena acercarse a un colegio electoral para refrendar el Estatuto.

Hacer historia

«Haremos historia de la que merece la pena, la mejor historia, la historia que se escribe con los votos, con la democracia, con la voluntad de la ciudadanía -señaló-; esa es la mejor historia y la peor: la que se escribe con las balas, la única que nunca estaremos dispuestos a aceptar».

La idea parecía remitir a la situación vivida hasta hace poco tiempo en el País Vasco y al terrorismo de ETA, pero entonces Zapatero dio un requiebro que cambió todo el sentido de la frase. «Esa es la razón por la que me alegro -dijo-, de que votárais como lo hicísteis en su día para que de nuestra historia se borrara la mancha de apoyar la guerra de Irak». De este modo realizó un elaborado llamamiento al voto útil.

Consciente de que el mensaje de los populares tiene mala venta en un amplio sector de la sociedad catalana, el presidente del Gobierno centró su discurso en la misma idea que defiende el lema de campaña del PSC (Si gana Cataluña, no gana el PP). En eso, y en contrarrestar el mensaje de Mariano Rajoy sobre la falta de libertades que augura el nuevo marco de autogobierno. «El domingo Cataluña va a responder y va a hacer un acto de afirmación democrática de su identidad porque los poderes que da a Cataluña este Estatuto y los derechos que da a los catalanes, nadie los va a cambiar», aseveró.

Polémico Maragall

El líder del PSOE afirmó que todo mejorará a partir del día 18 no sólo en Cataluña, sino en toda España porque la historia ha demostrado que esta comunidad autónoma «marca un liderazgo» para el resto del país.

En el último mitin del PSC también participó el presidente la Generalitat, Pasqual Maragall que, como tal- y contraviniendo las resoluciones de la Junta Electoral Central- pidió el «sí» al Estatuto de «todo el catalanismo». Antes que él, el secretario general de la federación y ministro de Industria, José Montilla, reprochó al PP que «criminalice» a toda la sociedad catalana con sus denuncias, lo que suscitó los aplausos de los presentes.