En octubre del año pasado, 'El solitario', al igual que el resto de los españoles, se desayunó con la noticia de la detención de Manuel N. R., de 48 años, un peligroso asaltante sobre el que pesaban 15 órdenes de busca y captura por distintos órganos judiciales. Se le imputaban más de 50 atracos en bancos cometidos desde el año 2000 a entidades de Andalucía, Castilla La Mancha y Extremadura. Como el que la Guardia Civil busca ahora, era un experto en el arte de 'ser otro' y se vestía con gorra y tupida peluca. También utilizaba diversas identidades falsas, españolas e italianas, para eludir la acción de la Justicia. Llegó a ser uno de los delincuentes más buscados.

En los archivos policiales figura, hoy por hoy, otro 'solitario', cuya imagen se ha obtenido de las tomas captadas por la videovigilancia. Este presunto atracador acostumbra a actuar en el Levante. Tiene gafas y bigote... falsos. No ha dejado víctimas mortales. Sí un largo reguero de pequeños asaltos cometidos en el último año. Los indicios 'reales' son escasos: 1,70 de estatura, complexión fuerte, 40-45 años.

«Son más los atracadores que actúan arropados por la banda», explican desde la Unidad Central de Operaciones de la Guardia Civil. En grupo, asaltan bancos y no se conforman con llevarse el dinero que hay en los mostradores. Van a por la caja. «Un error de uno de los miembros de la banda puede acabar con el resto. Cuatro dan más pistas que uno».