-¿A qué se dedicaba antes de ser pensionista?

-Regentaba un almacén de alimentación com mi marido. He estado trabajando desde el año 72 y era algo que no es que me apasionara mucho pero que me tenía bastante ocupada ya que trataba con mucha gente y eran muchas horas.

-¿Desde cuándo es usted pensionista?

-Desde que murió mi marido y mis hijas y yo decidimos vender el almacén. Concretamente desde el año 1992. Como ves no fue una decisión mía el convertirme en pensionista sino que las circunstancias de la vida me llevaron a ello.

-¿Cómo ve la situación actual de las pensiones?

-Sinceramente creo que es muy mala. La mayoría de los pensionistas cobramos una miseria que no nos llega ni para cubrir los gastos mínimos de una vivienda. El agua, la luz y el teléfono se llevan buena parte de este dinero, sin contar con los gastos en medicación (ya que una tiene cierta edad y necesita medicarse de sus problemas de salud). Por lo que para vivir no tenemos. Gracias a que en mi caso vivo con mis hijas y ellas se encargan de que no me falte de nada.

-¿Siente que tiene poca ayuda del Estado?

-La verdad es que sí. Se supone que tu te tiras toda la vida trabajando para que luego, el día de mañana, cuando te jubiles, tengas una cantidad de dinero digna que te permita vivir. Pero con 400 euros hoy en día no se puede hacer nada. Y la Junta de Andalucía que asegura que otorga ayuda a personas como yo tampoco. Llevo dos años esperando cobrar una ayuda de la Junta que no llega.

-¿Qué le parecen las actividades creadas para personas mayores por el Ayuntamiento de Jerez?

-Creo que están muy bien ya que éstas nos distraen y ayudan a vivir mejor el poco tiempo que nos queda. Aunque yo debido a mis males no puedo participar todo los que quisiera.