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El centro se convertirá en una fiesta motera durante el Gran Premio

El casco histórico estará totalmente abierto totalmente abierto al tráfico excepto Porvera, que se cortará el sábado por la tarde

Jerez Actualizado: Guardar
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La alcaldesa y el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, han comparecido esta mañana tras la reunión extraordinaria para abordar todo el dispositivo de seguridad de cara a los eventos que ahora se avecina. Respecto al más cercano, la Semana Santa, De Torre ha subrayado como novedad la actuación del Cecop para velar por la seguridad en los puntos de mayor aglomeración como las entradas y salidas de las hermandades y de la Catedral. Además, Guardias Civiles, Policía Local y Nacional se coordinarán con la seguridad privada contratada por las hermandades.

Respecto al Mundial de Motos, se mantiene el mismo dispositivo de seguridad del año anterior, con la novedad de que la ciudad se abrirá más al tráfico si cabe, con la salvedad de Porvera que se cortará al tráfico el sábado de motos desde las 17 horas para permitir el desarrollo de actividades en pleno centro.

Se trata, ha avanzado García-Pelayo, de poner en marcha una noche lúdico-comercial que convierta el centro «en un gran escenario» para aprovechar las grandes posibilidades económicas –también para la hostelería– y la afluencia de público y que revierta en Jerez más que en otros municipios cercanos.

En este sentido el subdelegado del Gobierno ha apelado a la responsabilidad de todos los ciudadanos y colectivos –ante la crispación existente– para que «la imagen de Jerez vaya cambiando y se note esa gran proyección que tiene de cara al exterior». Un llamamiento al que se ha sumado por supuesto la regidora jerezana pese a comprender la situación en que se encuentran muchos colectivos.

Para el Gran Premio, el dispositivo contará con un total de 620 guardias civiles, ha precisado, el mismo número de efectivos que en la anterior edición.

Pero lo más importante, ha recalcado Pelayo, es que Jerez «sea una ciudad abierta para todos, ciudadanos y moteros», de ahí esa puesta en marcha de «una noche lúdico-comercial» el sábado de motos en la que participarán hosteleros y comerciantes.

«Será una ciudada abierta, no estará blindada, pero sin que los moteros campen a sus anchas», ha precisado. A los moteros se les facilitarán aparcamientos para que lleguen andando al centro.