El Ayuntamiento prevé plantear un concurso de acreedores en Onda Jerez

Había tres posibilidades para intentar solucionar el problema que supone Onda Jerez para el Ayuntamiento: disolución, ampliación de capital o concurso de acreedores. Esta misma semana se aprobó una amplición de capital de 4,9 millones de euros y se advirtió que en diciembre tendría que producirse otra de 3,6 millones más. Eso descartaba, por lo tanto, la disolución de la empresa municipal.

Pero esa inyección económica, por lo visto, no es suficiente. Ya lo advirtió la alcaldesa, María José García-Pelayo, recientemente. Dijo entonces que posiblemente harían fata decisiones «más contundentes». Y así será. Mañana viernes se celebra un consejo de administración de Jecomusa –nombre de la sociedad municipal que gestiona Onda Jerez– y el gobierno local tiene previsto proponer la presentación de un concurso de acreedores. Está convencido de que no queda otra.

En caso de prosperar y de que la petición fuese posteriomente aceptada, la decisión conllevaría un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Se desconoce a cuántos trabajadores podría afectar, ya que esa decisión correspondería al correspondiente administrador concursal que se nombrase. Pese a todo, la lógica preocupación entrela plantilla –compuesta por 86 personas– es más que considerable. Sobre todo después de que el gobierno local les informase hoy, en una reunión celebrada a primera hora de la tarde, de cuáles son sus planes más inmediatos con Onda Jerez.

La ampliación de capital llevada a cabo el pasado martes, según la alcaldesa, era un «trámite necesario» para una sociedad en causa de disolución, una gestión sin la que era «imposible» pasar. Por ello no dejó de agradecer el trabajo realizado tanto a los técnicos como a los miembros del consejo de administración de la sociedad.

Tampoco se puede olvidar que «los consejeros responden penalmente» por la situación de las empresas municipales, situación que comparó con el caso del ministro en Islandia por la gestión de la crisis económica. De este modo, el día 10 expiraba el plazo máximo para realizar la citada operación de ampliación de capital. «Así salvamos a la sociedad pero no es la solución definitiva», destacaba no obstante la munícipe.

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