Jerez sobre ruedas

A finales de los años ochenta un grupo de locos surgieron en Jerez con un trozo de madera apoyado en dos pares de ruedas simétricamente colocadas. El fenómeno skate llegó a España, cruzó la península desde Barcelona al sur y paró en Jerez. Sin embargo, y pese a que aquellos pioneros hacían todo lo posible por tener su sello en una ciudad poco adaptada a tendencias modernas, de entre todos ellos llamaban la atención algunos valientes que apostaron por el patinaje en línea. Es decir, los patines de toda la vida, llevados al extremo que permitía la conocida U de la Plaza de Toros.

Ahora, dos décadas después, estos valientes tienen otras caras: Jerez Patina. «Este club ha sacado un gran grupo de amigos cohesionado y que cada día se hace más grande y sólido, poniendo de moda el patinaje en Jerez y colindantes». Luis Carreras es un joven jerezano que en 2008 vio como en Málaga los patinadores estaban organizados en un club. A partir de ahí, en su cabeza surgió una idea: «Llegar a todo el mundo, que la ciudad de Jerez patine». A partir de ahí comenzó la historia del último club de patinaje de Jerez, Jerez Patina. Una idea arriesgada que surge «en Internet», según comenta este joven jerezano y presidente del club, que nace oficialmente en enero de 2009.

«Con sólo diez meses de andadura, se está convirtiendo en un aliciente para los ciudadanos de Jerez, como un deporte que une gentes sin importar su condición», comenta su presidente. Con 24 socios «oficiales», ya que son muchos los que se atreven a patinar con ellos los días «de quedada en el Palacio de Deportes de Chapín», ha conseguido crecer gracias a la ayuda desinteresada de sus socios, así como de algunas empresas colaboradoras y a la «delegación de Deportes del Ayuntamiento de Jerez». Un club, cuya premisa fundamental es que todos los aficionados tienen cabida: «No importa el nivel que tengas, tu sexo, tu edad o el tiempo que tengas disponible... porque lo que nos une es una misma afición». Como bien dice Carreras, poco a poco este club «fue dejando de ser de ser cuatro gatos y el grupo fue aumentando y al mismo tiempo con el numero de socios y socias crecía la amistad entre nosotros. Ese vínculo que era el patín nos había unido a gente de diferentes condiciones pero con algo en común: patinar». Patinar, pero sobre todo «fomentar el patinaje como deporte para todos y todas y ser una alternativa al botellón u otras formas de reunirse. Lo importante es patinar y disfrutar patinando».

Ideas claras

El grupo nació en enero, pero cada uno de los integrantes del club ha aportado para sacar adelante la idea de adaptar Jerez al mundo del patinaje: «Cada socio puso algo de su parte y de su tiempo para gestionar otros asuntos internos como las camisetas, trámites burocráticos o el diseño de nuestra identidad corporativa cedida gratuitamente gracias a la Agencia de Comunicación The Room. Sino fuera por ellos, Jerez Patina CD no sería lo que es hoy». Es decir, un grupo de amigos que intenta patinar en Jerez, devolviéndole a la ciudad ese aroma ochentero de los primeros locos por el patín y que ya han encontrado a sus alumnos más avanzados.

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