«El profesor tiene que ser maestro, no colega de sus alumnos»

Forman un buen equipo. Son compañeros y amigos. Cada uno habla con respeto y admiración por el trabajo del otro: «Concha vale mucho», dice Elena. «Elena es muy buena organizadora», apunta Concha. En esos días de reuniones entre té y café se terminó de dar forma a lo que suscitó mi interés y he de suponer que el de usted, lector, también. Hay un Programa de Refuerzo para la Mejora de la Eficacia Lectora del que ellos son responsables y que hoy traemos a LA VOZ DE... Ya que abrazaremos todo aquello que mejore o contribuya a la educación y formación de los alumnos. De nuestros hijos. Antonio Peña, uno de los autores, es Psicólogo, licenciado con sobresaliente por la Universidad de Sevilla y maestro con Premio Extraordinario fin de carrera

-¿Qué les motivó para escribir este libro?

-A. Peña: En nuestra experiencia como orientadores, hemos comprobado que gran parte de las dificultades o problemas de aprendizaje que presentan los alumnos están asociados a los procesos lectores. Por otra parte también hemos detectado que el profesorado invierte tiempo y esfuerzo en trabajar la compresión lectora; sin embargo, otros aspectos, que también intervienen en el proceso lector y que están directamente implicados en la compresión, como es la fluidez lectora, no se suelen trabajar en la misma medida.

En el equipo se encuentra Teresa Gordillo, que es licenciada en Filosofía y diplomada en Magisterio, en la especialidad de Ciencias Humanas.

-¿Cuáles son los objetivos que pretenden conseguir ?

-Teresa: El programa de Eficacia Lectora propone alcanzar objetivos como: ampliar el campo visual. Potenciar la discriminación visual. Desarrollar la rapidez de localización de respuesta, la capacidad de anticipación lectora. Todo ello encaminado a aumentar la compresión de textos y lograr lectores eficientes.

A Francisco Freije, licenciado en Ciencias de la Educación y diplomado también en Filosofía, le pregunto qué es lo que entiende por «lectores eficientes», uno de los objetivos que persiguen los autores con su libro. «Aquél», me asegura, «que es capaz de lograr un perfecto ajuste entre comprensión y velocidad, adaptando ésta al tipo de texto que lee y a la finalidad de la lectura». Concha Flores escucha atenta y asiente a lo que responde su compañero. Esta licenciada en Ciencias de la Educación, especialidad en Orientación escolar, se diplomó antes en Magisterio. Es una entusiasta de su trabajo, de la formación y tiene una máxima: «Siempre hay tiempo o edad para aprender». Y llegó a sacar un Máster en Informática Educativa, y después un diploma de Estudios Avanzados.

-Ustedes señalan, en la introducción del libro, que la competencia lectora preocupa a los profesores. ¿Cómo solucionar el problema?

-Concha: Sería demasiado pretenciosos pensar que con nuestro libro o con las tareas que figuran en él, se resuelven todos los problemas asociados con la comprensión lectora. Este material es sólo un instrumento que contribuye a mejorar su eficacia. Pero sí, es cierto que el profesorado en general siente una gran preocupación por la competencia lectora, y les preocupa porque comprueban que una buena lectura es básica para los aprendizajes de todas las áreas y fundamental para la resolución de problemas. El aprendizaje de la lectura es quizás uno de los aprendizajes más difíciles a los que nos enfrentamos a lo largo de toda nuestra existencia.

-¿Con este Programa de Refuerzo disminuirá ese temor?

-A. Peña: Estamos seguros de ello, pues hemos comprobado que las tareas propuestas en nuestro libro son motivadoras y que los alumnos disfrutan con ella a la vez que aprenden. Es un material muy entretenido, muy lúdico, en el que el niño a través del juego, sin apenas percatarse de ello, va alcanzando los objetivos que se proponen en el libro.

-¿Qué actividades potenciarían habilidades como: la fluidez, la habilidad visual y otras que me gustaría que apuntaran aquí?

-Para trabajar la habilidad visual, la amplitud de campo, la percepción visual proponemos actividades como: cuadros numéricos y con mensajes. Revueltos de letras. Laberintos. Localización de elemento diferente en ilustraciones. Localización de absurdos en textos. Comparación de series distintas. Lecturas en columnas. Caligramas. Lecturas a partir de un punto central, textos con números que sustituyen a letras. Resaltar además, que con todo este tipo de actividades, se fomentan y ejercitan igualmente otras capacidades que intervienen directamente en el proceso lector, tales como: atención, comprensión, intuición, velocidad, habilidad visual, memoria, anticipación, etcétera.

-Este libro es una guía didáctica: ¿La tienen ya los colegios para este curso?

-Teresa: El libro está editado por la editorial E.O.S., en la colección Método E.O.S. Cuadernos de Recuperación. Es una editorial nacional y muy conocida en el ámbito educativo. Es un referente en lo que a atención a la diversidad se refiere. Los libros se pueden adquirir en cualquier librería o directamente desde la página web de la editorial.

Una de sus autoras, Concha, nos apunta que son dos tomos dirigido preferentemente a niños escolarizados en el segundo y tercer ciclo de Primaria. «No obstante esto es orientativo, dependerá de sus competencias lectoras». Los cuadernillos constan de 15 sesiones distribuidas en tres bloques de contenidos y un solucionario. Su aplicación puede ser tanto colectiva como individual.

-Ustedes son profesores y lo saben: hay alumnos a los que se les pregunta de forma distinta a como viene en el libro y no entienden las actividades o cuestiones del examen. ¿Cómo ayudarles?

-A. Peña: Mejorando su comprensión del lenguaje, tanto oral como escrito. Nuestros libros inciden en estas capacidades aunque el aprendizaje y la enseñanza del lenguaje y vocabulario son tarea y objetivo de todo el profesorado independientemente de su materia. Mejorar las competencias básicas en lenguaje es lo apropiado para mejorar la capacidad de aprendizaje de cualquier alumno.

-La aplicación, por parte del profesorado de este Programa de Refuerzo, ¿ayudará entonces al niño?

-Teresa: Estamos convencidos de ello. Las pruebas que hemos hecho aplicando en clase las actividades del libro así nos lo han mostrado; los alumnos se motivan y mejoran su eficacia lectora.

-En el libro se señala que la lectura es una actividad compleja con procesos complicados en sí mismos. ¿Qué intervine en el transcurso de la lectura?

-Francisco: La lectura no es una actividad simple, todo lo contrario, supone la puesta en marcha de un conjunto de actividades perfectamente coordinadas y sistematizadas (perceptivas, mentales, lingüísticas, atencionales, motivacionales), cada una de las cuales son, a su vez, procesos complejos en sí mismos. No es por tanto una mera unión o sucesión de palabras

¿Qué les proponen a los profesores para este nuevo curso, además de recomendarles su libro?

-Concha: En realidad nada diferente a lo que hacen: aprendizajes significativos, cercanos a los intereses del niño, ajuste del proceso de enseñanza a las necesidades específicas del alumnado, aprendizajes funcionales, que contemplen el desarrollo de las competencias básicas, que potencien la autonomía... Y que las distintas actuaciones que se lleven a cabo no sean acciones individuales, aisladas, sino actuaciones conjuntas del equipo docente y que obedezcan a un plan.

-¿ Qué papel tienen los padres?

-A. Peña: La educación es corresponsabilidad entre padres y profesores. Por tanto yo lo que recomendaría es que trabajen al unísono con los mismos objetivos, desarrollando al máximo las tutorías con padres.

Interviene Teresa durante la entrevista para recalcar que comprensión, velocidad y eficacia lectora están íntimamente relacionadas. «Que la mejora en una de ellas nos lleva irremediablemente a la mejora de la otra».

-¿Cuál sería el decálogo del buen lector?

-Francisco: El buen lector no lee con la boca. No mueve la cabeza sino lo ojos. Hace el menor número posibles de fijaciones oculares. Mira hacia adelante. Adivina lo que va a leer. Lee de manera diferente en función de los textos. Lee con una entonación adecuada. Lee el sentido del texto Dedica un tiempo diario a leer. Tiene a mano un diccionario.

-¿Cómo conseguir el hábito de la lectura y que no se abandone llegada la adolescencia?

-Concha: No es una tarea sencilla. Hay que empezar desde los primeros años, leyéndoles cuentos, a través del ejemplo, asistiendo a actividades literarias (cuentacuentos, ferias del libro.). Siempre habrá que dejarse llevar por los consejos de los profesionales, que sabrán ofrecernos una amplia variedad de títulos que se ajusten a los intereses y gustos de cada niño.

-La lectura, lo explican en su guía, «es el principal instrumento de acceso al aprendizaje, un pilar básico de la educación». ¿En qué medida influye en el fracaso escolar?

-A. Peña: La lectura, la interpretación de lo leído es clave para todo el proceso educativo. La comprensión y fluidez lectora contribuye a obtener una mejor y mayor cantidad de información. La lectura lenta interfiere en la comprensión y la rápida reduce la dependencia de la información visual. Una buena competencia lectora, facilita todo el proceso global de aprendizaje, contribuyendo de esta forma a prevenir el fracaso escolar.

-¿Qué otros factores influyen en el fracaso escolar?

-Francisco: Factores como hábitos de estudios, expectativas, dedicación familiar, capacidades, intereses, ambiente cultural de las familias.

-¿Cómo motivar a un niño que no quiere seguir estudiando?

-Teresa: Es algo difícil, pero utilizando la pedagogía del refuerzo, elevándole la autoestima y autoconcepto, premiando su esfuerzo, sus logros y aciertos.

-¿Qué libros recomendarían para los niños en edad de Primaria, que son a los que se dirige el libro de Eficacia Lectora?

-A. Peña: Hay una gran cantidad de libros apropiados y revistas que orienta con títulos en concreto. Me decantaría por aquellos que sirven para transmitir valores, alegría de vivir y buen humor.

-¿Y a los de ESO y Bachillerato?

-Francisco: Igual que a los pequeños, con la diferencia de que a estos alumnos no es necesario dirigirlos tanto, sino simplemente ofrecerles publicaciones que coincidan con sus intereses.

-La Editorial Aljibe será la encargada de publicarles el próximo libro. ¿Cuándo saldrá y de qué tratará el mismo?

-Concha: Estará disponible a partir del mes de enero. La editorial como usted dice es la andaluza Aljibe, muy conocida en el ámbito educativo y de gran prestigio. El libro tiene un enfoque práctico que permite transferir aprendizajes escolares a escenarios reales. Es decir, se puede trabajar tanto en casa como en las aulas e incide en temas como la educación vial, para la salud o la coeducación. También trabajamos en valores como: la tolerancia, el respeto, la solidaridad y la diversidad. Se podrá adquirir por cuadernillos o en colección completa.

-Como pedagogos, ¿tienen algunos consejos para este curso que acaba de comenzar?

-Teresa: El trabajo diario, continuo, sistemático. Que planifiquen un buen horario de estudio y de ocio que permita compaginar todas aquellas actividades que deseen. No es necesario dejar atrás ninguna actividad Que pregunten por aquello que no se han enterado o lo averigüen por ellos mismos.

Antes de abandonar la reunión y mientras me acompañan a la salida, comentamos la propuesta de alguna comunidad sobre volver al «usted» o «la tarima» en la clase y si esto resolvería algo la indisciplina que existe en algunos centros educativos.

-Concha: Cada uno ha de asumir su propio papel. El profesor ha de ser maestro y no colega de sus alumnos; esto no implica distancia o desapego. No creo que el estrado o el usted vayan asociados a un mayor respeto o terminen con los problemas de disciplina. Creo que habría que insistir más en la educación de los valores y en currículos más cercanos a los intereses de los alumnos. Además, cada centro educativo tiene como la carta de derechos y deberes del alumno un plan de convivencia, con medidas que favorecen las relaciones entre la comunidad educativa, y que dan respuesta a los conflictos.

El curso escolar ha comenzado para todos. Y como dicen también estos representantes de la comunidad educativa: las actividades y el deporte, siempre que no se sobrecarguen, les servirá como estímulo. Suerte para todos los que comienzan el curso.