españa ante la crisis

Zapatero no descarta modificar la ayuda de 420 euros para los parados

El presidente del Gobierno ha anunciado que, tras evaluar con los sindicatos las ayudas, está dispuesto a modificar las características y criterios de esta prestación

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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado que, tras evaluar con los sindicatos la entrada en vigor de las ayudas extraordinarias a desempleados, el Ejecutivo está dispuesto, si así se considerara, a modificar las características de la prestación de 420 euros. Zapatero ha destacado el importante esfuerzo económico que hace el Gobierno español con esta medida, la primera de este tipo que se aprueba en Democracia.

Zapatero considera "injustas" las críticas de "aquellos que no han propuesto nada para desempleados y que quieren recortar subsidios y ayudas públicas" y que, según dice, han puesto "el grito en los cielos ante la aprobación de esta prestación nueva".

El presidente se compromete a dialogar con los sindicatos para hacer "lo más eficaz la medida y la prestación desde el punto de vista social y que abarque al número de personas que lo pueden necesitar", al tiempo que solicita a "todo el mundo" que se entienda que es una medida nueva. "Aun no podemos determinar, nadie puede determinar, el número de beneficiarios, por tanto, debemos tener todos la prudencia para hacer una evaluación definitiva de resultados".

Colaboración con las CCAA

El presidente del Gobierno ha anunciado para el próximo 26 de agosto una reunión con las comunidades autónomas, a las que solicita su colaboración en la entrada en vigor de esta nueva ayuda para las personas que ya no tienen la prestación contributiva o asistencial. Zapatero considera que "va a ser el período de mayor protección y formación ante el desempleo porque la prestación esta pensada para que, a través de un itinerario formativo, las personas que ya no tienen esa prestación por desempleo, puedan cuanto antes tener un empleo". "Ese es el objetivo prioritario y, para ello, necesitamos la colaboración con las comunidades autónomas".

El presidente ha explicado que al ser una prestación nueva de carácter extraordinario que dura seis meses siempre surge la duda de dónde comienza, "dónde se pone el inicio del derecho a la prestación". "El Gobierno entendió que una posición razonable era el momento de la aprobación y, lógicamente, va a suponer un esfuerzo económico de las arcas públicas".

Zapatero recalca: "la sensibilidad social y las necesidades de las familias es lo que más cuenta para este Gobierno y para mí y, por tanto, con la evaluación que exige estamos dispuestos, dialogando con los sindicatos, a hacer lo más eficaz la medida y la prestación desde el punto de vista social y que abarque al número de personas que lo pueden necesitar".