Bigas Luna recibe, entre fogones, el premio al gourmet del año

El director de cine Bigas Luna anunció en San Sebastián al recibir el premio de la Guía Lo Mejor de la Gastronomía 2008 al gourmet del año que en su próxima película la cocina estará más presente que nunca.

Durante la entrega de este galardón, Bigas Luna afirmó que la comida tiene presencia en toda su filmografía, pero que ya tiene una idea de un próximo filme en el que será aún más evidente.

Recordó que en su vida «la culpa de todo la ha tenido el ajo, el jamón y el aceite de oliva», y admitió que lo más que le gusta en el mundo es comer.

Una afición que siempre le ha dado disgustos, pues su madre le gritaba por estar gordo, sus compañeros del colegio le pegaban por comerse sus bocadillos, su mujer le pone a dieta y el médico le asusta con las enfermedades.El director bromeó al afirmar que este premio de Lo Mejor de la Gastronomía es la primera gran satisfacción que le ha dado este vicio por el comer.

Más galardones

En la cena de entrega de premios, que tuvo lugar el lunes, el cocinero Josean Martínez Alija, del restaurante Guggenheim, obtuvo el de mejor cocinero del año, un galardón que recibió con humildad, como asegura que afronta su trabajo en la cocina y que le lleva desde poner unos pinchos en la barra para turistas a ofrecer sus conceptos más vanguardistas.

El premio de repostero del año fue para Quique Dacosta y Juanfra Valiente, de El Poblet de Denia (Alicante), pues según el director de la guía de Lo Mejor de la Gastronomía, es el primer año que trabajan en el mundo dulce con el mismo nivel que en el salado.

Dacosta también recibió el premio de la Guía a la innovación conceptual o técnica y al plato más bello por La otra luna de Valencia, que elabora el valenciano con sepia y con una estética casi pictórica.

El cocinero Fernando Pérez Arellano, del restaurante Zaranda, en Madrid, recibió el premio al Grande del mañana, mientras que el galardón de la Guía a la mejor materia prima fue para Manuel Domínguez y su hijo Diego por las excelentes mariscadas que ofrecen en sus restaurantes Combarro y Sanxenxo en Madrid.

El premio a la mejor labor en pro del queso fue para Pedro Subijana, ya que continúa sus investigaciones con los sabores lácteos del queso, y por la mejor dirección de sala se premió a Lolita y Paquita Rexach de Hispania, que atienden a cientos de personas cada día.

Para la mesa mejor vestida se llevó el premio El Celler de Can Roca, y a la mejor labor en pro del vino fue para Juli Soler, de elBulli, aunque el premio lo recogió en su nombre Ferrán Adriá, quien resaltó que en los seis meses de cierre del restaurante tanto Julio como David están investigando en conseguir los mejores caldos de las mejores bodegas.

Eñe recibió el premio a la boutique gastronómica y el restaurante madrileño Puerta 57 con Carlos Tejedor a la barra del año, mientras que Pepe Dioni, de Kabutzia, en San Sebastián se hizo con el galardón de coctelero del año.

El premio a la mejor labor en pro del café fue para Pedro Cañas, del Hotel Intercontinental, el de empresario del año para Josep María González, de Gargantúa y Pantagruel, Abac y Gaig, y el de la mejor publicación fue para Un día en elBulli.