Al menos ocho muertos y más de cien heridos en un atentado en la capital kurda de Turquía

Al menos ocho muertos y más de cien heridos es el saldo de la explosión este viernes de un coche bomba en Diyarbakir, la capital de la región kurda de Turquía, del que las autoridades han responsabilizado a la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). «Algunas personas, incluidos agentes de Policía y civiles, han muerto por la patria», comunicó el ministro de Justicia, Bekir Bozdag, según señala la agencia Dogan.

Previamente, se había informado de que 30 personas habían resultado heridas en una explosión que la oficina del gobernador de Diyarbakir atribuyó a un coche bomba colocado por «una organización terrorista separatista» (como las autoridades se refieren al PKK), informa Efe. La explosión se produjo a unos 200 metros de una prisión y de un edificio de la Policía, y afectó a numerosos coches y casas en un área de un kilómetro cuadrado, según indicó la oficina del gobernador de Diyarbakir.

La detonación se produjo sobre las 8:00 de la mañana, hora local, en una zona «atestada de civiles y estudiantes», según la oficina del gobernador.

El atentado ocurrió después de que la Policía detuviera la pasada madrugada a Selahattin Demirtas y Figen Yüksekdag, copresidentes del izquierdista Partido Democrático de los Pueblos (HDP), tercero del Parlamento y conocido por su defensa de los derechos de la minoría kurda. Yüksekdag fue arrestada en su casa en Ankara y Selahattin Demirtas momentos más tarde en Diyarbakir, la «capital» de las regiones kurdas, informó la cadena NTV.

Sin inmunidad parlamentaria

En una operación simultánea en varias provincias, la mayoría situadas en el sureste del país, la policía detuvo a un total de once diputados del HDP. Las detenciones se practicaron en el marco de una investigación sobre terrorismo relacionado con el proscrito PKK, iniciada en agosto, por la que ambos dirigentes políticos habían recibido citaciones judiciales. Demirtas y Yüksekdag se habían negado a acudir al tribunal, dada su condición de diputados, pero en mayo pasado el Parlamento aprobó retirarles la inmunidad parlamentaria.

La investigación judicial que involucra a los diputados se centra en las protestas de octubre de 2014 en las que se enfrentaron activistas de la izquierda kurda y simpatizantes islamistas con motivo del asedio de Daesh a la ciudad kurdosiria de Kobani. A los diputados del HDP se les acusa de haber incitado a la violencia durante estas protestas, que dejaron varias decenas de muertos.