Uribe y Pastrana temen reformas «superficiales» al pacto con las FARC

Después del «no» de los colombianos a los acuerdos firmados entre Bogotá y las FARC, en el plebiscito del 2 de octubre, los expresidentes Álvaro Uribe (2002-2010) y Andrés Pastrana (1998-2002) advirtieron este lunes en Madrid del riesgo de que el Gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla se limiten a realizar reformas «superficiales» al pacto rechazado en las urnas. Los exmandatarios, principales valedores de la campaña del «no», expresaron ese temor durante el IV Foro Atlántico del IADG, en el que también intervino el expresidente José María Aznar y fue moderado por el adjunto al director de ABC, Ramón Pérez-Maura.

Uribe cree que Santos «jurídica y políticamente puede hacer reformas superficiales e implementar los acuerdos», pero confió en que «se logre un pacto nacional con unas reformas de fondo».

El líder de Centro Democrático agregó que Bogotá podría presentar el acuerdo retocado de forma superficial «como nuevo y la Corte Constitucional le permitiría convocar un nuevo plebiscito; incluso podría hacerlo a través de un procedimiento ordinario del Congreso, donde tiene mayoría». Pero espera que un «gran acuerdo nacional corrija todo lo que supone un riesgo para la democracia».

Su antecesor en el Palacio de Nariño coincide en que «en manos del presidente» está ahora la decisión de convocar «un gran consenso nacional por la paz». Pastrana destacó que el «acuerdo de La Habana no existe», fue rechazado por los colombianos en las urnas y «por eso hay que construir uno nuevo».

El político conservador se mostró dispuesto a «acompañar» a Santos para se mantenga el alto el fuego bilateral. En otras partes del acuerdo propone modificaciones de una sola palabra: un «podrá» por un «tendrá» sobre las obligaciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Pero también marcó sus «líneas rojas», como es que las 297 páginas del pacto entre el Gobierno y la guerrilla se incorporen a la Constitución. «Significa que 5.700 guerrilleros habrían modificado la Constitución de 50 millones de colombianos», explicó Andrés Pastrana.

José María Aznar espera que la comunidad internacional y, en concreto, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y su nuevo ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, «tomen nota» del resultado del plebiscito, porque «sería insólito y tendría consecuencias políticas devastadoras despreciar la voluntad expresada por los colombianos».

Falta de consecuencias políticas

Lamentó la falta de «consecuencias políticas» que ha habido para los defensores del «sí». En este sentido, planteó la pregunta de si «yo aceptaría en mi país que se produjera un plebiscito, con unos resultados y que no se produjesen consecuencias políticas con ese resultado. La respuesta es no». Y recordó la dimisión de David Cameron en el Reino Unido tras el resultado del referéndum del Brexit.

El exmandatario español criticó el apoyo casi unánime de la comunidad internacional a los textos negociados en Cuba. Su pregunta «capital» es: «¿Yo aceptaría para mi país en circunstancias parecidas, o para alguna de las circunstancias parecidas, los términos de los acuerdos firmados en Colombia por ejemplo en materia antiterrorista? La respuesta es no».

Aznar valoró el «ejercicio de liderazgo» de Pastrana y Uribe durante todo el proceso para alcanzar una «paz democrática» en Colombia, que recalcó que tiene como garantes a países tan cuestionados como Cuba y Venezuela.