Ignacio Gil

Tres días de cerco policial para detener a un vecino peligroso en Londres

Un gran despliegue de agentes rodea desde el viernes la casa de un hombre, que podría hacerla volar con combustible

LONDRES Actualizado: Guardar
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La Policía Metropolitana lleva tres días intentando desalojar, por ahora sin éxito, a un vecino peligroso en el barrio de Northolt, en el Noroeste de Londres. Desde el pasado viernes a primera hora de la mañana, un gran despliegue rodea su domicilio, con numerosos agentes armados y más de cinco furgonetas policiales frente a la vivienda. El incidente no tiene relación con el terrorismo. Se cree que se trata de un hombre con problemas mentales, dueño de perros peligrosos y que ha hecho acopio de gran cantidad de combustible y podría provocar una deflagración.

La situación es insólita por la duración del cerco, pero la policía insiste en que su prioridad es «resolver esta situación de la manera más segura para todos, incluido el propio hombre».

El mismo viernes fueron evacuados ochenta vecinos, acogidos en hogares de familiares o alojados por las autoridades en hostales «bed and breakfast». Una prima del individuo ha comentado a la BBC que hace poco sufrió «una crisis nerviosa».

La policía intenta entrar en contacto con él con negociadores especializados, pero por ahora su mutismo es absoluto. «La operación durará lo que sea necesario. Estamos utilizando nuestras tácticas para que todo acabe de un modo seguro», ha declarado el jefe del operativo. Un cordón policial de 200 metros de ancho rodea la vivienda.

Perros de raza rottweiler

Según algunos vecinos, el hombre solía pasear por el barrio con varios perros de la raza rottweiler, conocida por su agresividad. El incidente coincide con un fin de semana de nervios en Londres. El viernes fue detenido un joven de 19 años por colocar el jueves una bomba casera en un vagón de la Jubilee Line, lo que obligó a los artificieros a explosionarlo y también a cerrar durante siete horas la estación de North Greenwich y el O2 Arena. Hoy ha sido desalojada también durante unas horas la estación de Moorgate, en la Northern Line, y se suspendió el recorrido entre Kennington y la popular parada de Camden Town, donde está el mercado del mismo nombre. De nuevo se trató de un paquete sospechoso en un vagón.

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