Los transexuales de Estambul se movilizan para condenar el último asesinato de una activista

Las denuncias por la aparición del cadáver calcinado de Hande Kander han llegado hasta el Parlamento turco

CORRESPONSAL EN ESTAMBUL Actualizado: Guardar
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La comunidad turca LGBTI (Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales) vuelve a estar de luto. Después de que su pareja hubiera denunciado su desaparición, el cuerpo sin vida de Hande Kander, una conocida defensora de las trabajadoras sexuales, apareció recientemente calcinado.

Las organizaciones por los derechos del colectivo LGBTI consideran que se trata de un crimen de odio. Además, no es un caso aislado. El más reciente fue el del joven y gay refugiado sirio Muhammed Wisam Sankari, asesinado y mutilado hace solo unas semanas.

Es por ello que diversas organizaciones han convocado una marcha hoy en el centro de Estambul para protestar y exigir el fin de los crímenes homofóbicos, transfóbicos y contra toda la comunidad LGBTI.

El caso de Hande Kander, además, ha conmocionado a la sociedad por su notoriedad. Kander, que trabajaba como prostituta, saltó a la fama en la marcha del Orgullo de 2015, cuando su imagen resistiendo los embistes de la policía en forma de cañones de agua y gases lacrimógenos dio la vuelta al mundo. Las dos últimas ediciones anuales de las manifestaciones del Orgullo Gay y Transexual han sido prohibidas por el Gobierno del islamista AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo)

El de esta joven de 23 años no es más que el último asesinato de una larga lista. Un informe de la organización «Transgender Europe» desvela que en los últimos ocho años al menos 43 mujeres han sido asesinadas. La diputada del socialdemócrata CHP (Partido Republicano del Pueblo) Selina Dogan eleva esta cifra hasta 45. Dogan ha sido la encargada de llevar al Parlamento turco el asesinato de Kander para protestar contra las «políticas discriminatorias» del Gobierno.

En Turquía es legal ser transexual y una persona puede cambiar su sexo, pero solo a través de un largo y tedioso proceso burocrático, así como tras una cara operación quirúrgica. No obstante, la conservadora sociedad turca continúa estigmatizando a estas personas, a quienes no les queda prácticamente otro opción más que dedicarse a la prostitución. Según una encuesta de Lambda Turquía, una asociación en defensa de los derechos de las personas LGBTI, el 67% de las transexuales se dedica a la prostitución, y el 18% se encuentra sin empleo.

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