La policía francesa interroga a Fillon y su esposa por el escándalo de los empleos ficticios

Según la cadena de información permanente BFMTV, François Fillon y su esposa Penelope han sido interrogados por la policía, que instruye el escándalo del presunto empleo ficticio del que pudo beneficiarse la mujer del candidato conservador a la presidencia de la República.

El semanario satírico «Le Canard Enchaîné» descubrió la semana pasada que Penelope Fillon cobró más de 500.000 euros, como asistenta parlamentaria de su esposo y su suplente, en la Asamblea Nacional, durante poco menos de una década.

Todos los diputados franceses tienen a su disposición un «sobre» de más de 9.000 euros, del presupuesto público, con el que pueden pagar los servicios de varios asistentes parlamentarios. En el caso de Penelope Fillon, se sospecha que pudo cobrar entre 4.000 y 7.000 euros, mensuales, durante varios años, sin prestación laboral de ningún tipo.

Ante un caso denunciado por la prensa, la justicia ha decidido abrir una instrucción «preliminar», con el fin de iniciar o descartar un eventual proceso contra Fillon por eventual extorsión de fondos públicos. En el marco de esa instrucción, previa a cualquier eventual «proceso», los esposos Fillon están siendo interrogados, tal como ha pedido personalmente el líder conservador la semana pasada, considerándose víctima de un «proceso público abominable».

Hace días, Fillon declaró que retiraría su candidatura a la presidencia de la República, si la justicia terminase decidiendo instruir un eventual proceso por una presumida extorsión de fondos públicos. Todos los especialistas han insistido en que, en verdad , la «lentitud» de la justicia francesa «impediría» la apertura de tal instrucción, antes de las elecciones presidenciales del 23 de abril y el 7 de mayo próximos.

De manera mucho más rápida de lo previsto, la policía judicial ha comenzado por interrogar a los esposos Fillon, sin prejuzgar de ninguna manera el resultado final de tales interrogatorios, que deberán presentarse a la autoridad judicial para tomar la decisión que considere oportuna.

Caída en las encuestas

Todo esto sucede cuando alguna encuesta comienza a poner en duda el favoritismo de Fillon. Según, informa EFE, el instituto demoscópico Kantar Sofres One Point, que ha realizado su sondeo entre el jueves y el viernes inmediatamente después de que saliera a la luz el escándalo, ha constatado el importante avance del social-liberal Macron en detrimento del aspirante de la derecha francesa.

De acuerdo con este estudio publicado por «RTL», «Le Figaro» y «LCI», en la primera vuelta de las presidenciales, prevista para el 23 de abril, la presidenta del Frente Nacional (FN), Marine Le Pen, quedaría en primera posición con un 25% de los votos.

Le Pen se distanciaría de los dos siguientes, Fillon (22%) y Macron (21%) y mucho más del ganador ayer de las primarias socialistas, Benoît Hamon (15 %), quien adelantaría al candidato de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon (10 %).

El director general del instituto demoscópico, Emmanuel Rivière, «en este contexto particular de la revelación del escándalo de los empleos ficticios, la calificación de Fillon a la segunda vuelta ya no está garantizada». Desde su victoria en las primarias de la derecha en noviembre hasta ahora todas las encuestas daban por hecho que Fillon y Le Pen se disputarían el Elíseo en la segunda vuelta el 7 de mayo, ya que mantenían una distancia considerable con el tercero en liza, Macron.

En un supuesto duelo entre Le Pen y Fillon, el que fue primer ministro durante la presidencia de Nicolas Sarkozy (2007-2012) ganaría a la líder de la extrema derecha, pero con un 60% frente a un 40%, una ventaja inferior a la que le daban los sondeos precedentes.

Y en caso de enfrentarse en la segunda vuelta a Macron, sería derrotado, ya que obtendría un 42% de los votos, frente al 58% del que fue ministro de Economía de François Hollande hasta agosto del pasado año, que no quiso participar en las primarias socialistas y se presenta con un programa (hasta ahora no muy definido) social-liberal.

Si los dos que llegan a la final fueran Le Pen y Macron, este último derrotaría de forma todavía más contundente a la presidenta del FN, con un 65% frente al 35%.