Los cancilleres de los estados miembros del Mercosur denunciaron hoy en Buenos Aires la «intromisión sistemática» del Tribunal Superior de Justicia venezolano en las competencias de la Asamblea Nacional
Los cancilleres de los estados miembros del Mercosur denunciaron hoy en Buenos Aires la «intromisión sistemática» del Tribunal Superior de Justicia venezolano en las competencias de la Asamblea Nacional - EFE

Mercosur reclama «asegurar la separación efectiva de poderes en Venezuela»

El gobierno de Mauricio Macri, claramente enfrentado al régimen de Maduro, convocó el viernes de urgencia a los cancilleres

CORRESPONSAL EN BUENOS AIRES Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Al Mercosur (Mercado Común Suramericano) se le acumula el trabajo con Venezuela (Paraguay es otro tema). La reunión de urgencia convocada por la canciller Susana Malcorra (Argentina es presidente pro témpore) sentó en la misma mesa a los responsables de Asuntos Exteriores de los países fundadores del bloque: Uruguay con Rodolfo Nin Novoa, Paraguay con Eladio Loizaga y Brasil con Aloysio Nunes.

El gigante sudamericano y locomotora del Mercosur llegó a Buenos Aires, según fuentes extraoficiales, con la postura más dura: impulsar la expulsión de Venezuela del bloque. Finalmente, los cancilleres optaron por destacar la «crisis política, institucional, social, de abastecimiento y económica que atraviesa Venezuela», y leyeron un documento donde reclaman a Maduro garantías para «asegurar la separación efectiva de poderes».

Malcorra, en declaraciones a la prensa, consideró: «Ha habido una intromisión sistemática por parte del Tribunal Superior de Justicia de Venezuela sobre la Asamblea Nacional... Es cierto que —el Supremo— ha decidido volver atrás en algunas decisiones que se tomaron pero también es cierto que ha mantenido la que tiene que ver con el desacato. La separación de los poderes no está funcionando», insistió.

Respecto a la decisión específica del Tribunal Supremo de dar marchar a atrás a su decisión de anular las atribuciones del Poder Legislativo, medida que la más alta institución judicial (totalmente desprestigiada) reconsideró el sábado ante el escándalo mundial, Malcorrá añadió: «Tenemos que admitir que es muy sintomático que esta reacción se haya producido tan rápido luego de que se convocara a la reunión anoche».

El gobierno de Mauricio Macri, claramente enfrentado al régimen de Maduro, convocó el viernes de urgencia a los cancilleres, «ante la grave situación institucional en la República Bolivariana de Venezuela». La convocatoria se produjo para «analizar posibles vías de solución» a una crisis de años que estalló el viernes con lo que el mundo interpretó como «un auto golpe».

Mientras los cancilleres debatían, a las puertas del Palacio de San Martín, sede de la Cancillería, cerca de un centenar de venezolanos entregó una carta donde exigían elecciones libres, ayuda humanitaria y libertad para los presos políticos en Venezuela. En simultáneo, un grupo de kirchneristas encabezados por el piquetero Luis Delía, ex subsecretario de Tierras durante el Gobierno de Néstor Kirchner, se concentro con varias decenas de chavista en defensa del Gobierno de Nicolás Maduro. Entre las consignas y las leyendas que mostraban repetían: «No a la intervención en Venezuela», «Somos la esperanza. Venezuela no es una amenaza», «Golpe es Mercosur» o «Fuera Yankis».

El presidente Mauricio Macri, abiertamente enfrentado al régimen de Caracas aunque con prudencia extrema en sus manifestaciones, recibió el jueves a Lilina Tintori. Macri respaldó a la mujer de Leopoldo López y, una vez más, le expresó su deseo de que Venezuela retome la senda de la democracia.

Ver los comentarios