Al menos diez muertos y medio centenar de heridos en la colisión frontal de dos trenes al sur de Alemania

«De repente el tren se puso al revés, todo eran gritos y yo no alcanzaba a entender qué estaba pasando. Cuando nos quedamos quietos vía que a mi alrededor había mucha gente sangrando y mucha confusión. Las primeras ambulancias tardaron unos veinte minutos en llegar y esa espera ha sido la parte más angustiosa». Así ha descrito los hechos Georg, un estudiante de 22 años que, como alrededor de otros cien pasajeros, ha salido por su propio pie del tren después del choque frontal de las dos locomotoras a la altura de la localidad de Bad Aibling, en Baviera. Las cifras hablan ahora mismo de 9 muertos y alrededor de un centenar de heridos, de los cuales quince están muy graves y cuarenta graves.

Se trata de dos trenes «Meridian», propiedad de la compañía privada de ferrocarriles Bayerische Oberlandbahn, que el estado federado subcontrata habitualmente para cubrir trayectos de cercanías en fechas de mayor tráfico de pasajeros, como es el caso de este Martes de Carnaval.

Georg viajaba en uno de los últimos vagones, pero los pasajeros situados en vagones más próximos a las locomotoras han sufrido un mayor impacto. El número de víctimas mortales no ha podido ser precisado todavía de forma definitiva porque en las tareas de rescate participan bomberos, policía, asociación ADAC y varias ONG,s, tanto locales como de la vecina Austria, que han acudido para apoyar el dispositivo alemán. La recopilación de datos, por tanto, se complica. La Policía confirma por ahora cuatro fallecidos pero hay medios de comunicación locales que informan de hasta ocho muertes.

El choque se ha producido esta mañana a las 6:48 horas y en un tramo de una sola vía, por lo que parece evidente que uno de los trenes no respetó debidamente la señalización. En estos momentos, 15 helicópteros están trasladando a los alrededor de 150 heridos a diferentes centros médicos de Múnich.

El jefe de la Policía de la región sur de Alta Baviera, Stefan Sonntag, ha descrito las circunstancias del accidente asegurando que «las dos locomotoras se han empotrado la una en la otra y los dos trenes han descarrilado, desplazándose varios cientos de metros por terrenos agrícolas».

El director gerente de la empresa Bayerischen Oberlandbahn (BOB), Bernd Rosenbusch, ha declarado que «estamos consternados y en este momento centramos todos nuestros esfuerzos en ayudar a las víctimas y a sus familiares».