Dimite Hope Hicks, la directora de comunicación e «hija adoptiva» de Trump

Hicks, investigada por la trama rusa, era la última persona del equipo inicial que permanecía junto al inquilino de la Casa Blanca

Manuel Erice Oronoz

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Hope Hicks , directora de Comunicación de la Casa Blanca y una de las personas de mayor confianza de Donald Trump desde que se lanzara a la campaña presidencial, ha presentado su renuncia.

La salida de Hicks, la cuarta persona que desempeñaba el cargo desde el comienzo del mandato, en enero de 2017, se une a la larga lista de dimitidos y destituidos que, en apenas trece meses y medio, han abandonado la Casa Blanca, en una prolongada estampida sin precedentes. Era la última persona del equipo inicial que permanecía junto al inquilino de la Casa Blanca.

La renuncia de Hope Hicks, sin experiencia política y conocida como la hija adoptiva de Trump, por su amistad con Ivanka, fue presentada ayer por sus superiores como un adiós formal exento de polémica, con encendidos elogios del presidente y de su jefe de gabinete, John Kelly .

La versión de la Casa Blanca y de la propia afectada, que sitúa en un cambio de aires personal y profesional la razón fundamental de su marcha, coincide con la del «New York Times», que adelantó la noticia minutos antes de que fuera confirmada. Según esta información, la que fuera jefa de prensa de Donald Trump durante la campaña electoral habría tomado esta decisión meses antes.

Sin embargo, que la dimisión se haya producido al día siguiente de su maratoniana declaración ante el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, que investiga la trama rusa, ha levantado suspicacias. Durante las casi nueve horas que duró el interrogatorio de los congresistas, Hope Hicks se defendió con la confesión de haber realizado «mentiras blancas» , para defender a su jefe, pero negó conocimiento alguno de posibles connivencias de Donald Trump con el Gobierno ruso o que hubiera participado en contacto alguno para ese fin.

Precisamente, el fiscal especial, Robert Mueller, ha seguido durante meses los pasos de la ya exdirectora de Comunicación de la Casa Blanca, aunque ningún miembro de su equipo ha llegado a interrogarla directamente.

Hasta entonces modelo de profesión, Hope Hicks se incorporó como jefa de prensa de Donald Trump en 2015 , cuando el hoy presidente lanzó su carrera para la nominación por el Partido Republicano.

Sus 26 años no fueron obstáculo para que el magnate estableciera con ella una relación de plena confianza, prolongada hasta ayer. Su aversión a situarse delante del foco le llevó siempre a mantenerse a la sombra de Donald Trump. También cuando se produjo el desembarco en el Despacho Oval. Primero, como asesora de prensa, y después, como directora de Comunicación. «Hope es sobresaliente y ha hecho un gran trabajo durante los últimos tres años. Es muy inteligente, así como una gran persona. Extrañaré no tenerla a mi lado, pero cuando me consultó para buscar otras oportunidades, lo entendí totalmente», dijo en un comunicado facilitado por la Casa Blanca.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación