Comienza en Alemania el juicio contra los Wagener, la pareja del terror

El juicio contra los Wagener ha comenzado este miércoles en Paderborn con escabrosos detalles de las torturas que Wilfried (46) y –su ahora exmujer– Angelika (47) realizaban a sus víctimas en su granja de Höxter, en el estado alemán de Renania del Norte-Westfalia. La Fiscalía los acusa de haber infligido heridas mortales a dos mujeres en su vivienda, conocida por la prensa local como la «casa de los horrores». Otras seis mujeres habrían sido secuestradas y torturadas por los Wagener, sin embargo habrían logrado escapar con vida.

La pareja que se hacía pasar por hermanos ante sus víctimas y vecinos, retuvo durante años y de manera sistemática a mujeres a quienes contactaban a través de anuncios en Alemania y en la República Checa, indicando que Wilfried buscaba una compañera para una «relación seria». El caso se destapó el 21 de abril cuando los Wagener transportaban a Susanne F.

de 41 años de vuelta a su casa en Baja Sajonia y al averiarse el motor debieron tomar un taxi. La mujer retenida por los acusados y maltratada durante semanas después de que contactara con el hombre en febrero empeoró su estado de salud y tuvieron que transportarla a un hospital donde murió dos horas después.

La Fiscalía que ha informado que la pareja acabó con la vida de al menos otra mujer dos años antes de Susanne F., ha culminado el miércoles con la lectura del acta de acusación y se espera que el proceso dure varios meses por lo menos hasta la próxima primavera. Según Angelika W. la primera víctima habría sido Annika W. de 33 años, quien se habría casado con Wilfried y después divorciado, pero seguían viviendo juntos. Los Wagener habrían matado a Annika en agosto de 2014, puesto su cuerpo en un congelador y la habrían troceado y quemado en una estufa de leña.

Wagener, que ya había sido condenado por agresión y secuestro en los años 90, ha rechazado las acusaciones y culpa a su exmujer, quien ha afirmado que actuó siempre bajo la influencia de su marido, quien además la maltrataba. El miércoles, el abogado de Wilfried W. pidio un nuevo examen psicológico de su cliente, aduciendo que el primer examen, que le atribuía tendencias sádicas, contenía errores. A sus víctimas, los Wagener les habrían arrancado a tirones el pelo, encadenado a radiadores y a la bañera, golpeándolas sistemáticamente y manteniéndolas aterrorizadas en habitaciones sin calefacción.