Mochilas portabebés en verano ¿sí o no?

Hay muchos padres que prefieren las mochilas portabebés para llevar a sus hijos durante todo el año, y no es sólo por el apego, es una manera cómoda de transportar al niño y a la vez tener las manos libres para poder realizar otras actividades. Pero con el calor se plantea la duda de si los bebés van cómodos o no. Dos expertas opinan sobre este tema.

A favor

Eva Gracia, madre, bloguera y empresaria. La co-fundadora de Kangarunga, la primera tienda española especializada en mochilas portabebés ergonómicas, afirma que las mochilas pueden usarse todo el año por las siguientes razones:

- Los bebés están hechos para ir en brazos, con independencia de la época del año en que hayan nacido. Los niños pequeños necesitan nuestro contacto tanto como el alimento, no hay razón para negárselo porque haga calor.

- Como los bebés necesitan brazos y les vamos a coger haga el calor que haga, vamos a sudar más si lo hacemos desde la incomodidad de llevarle sin ningún tipo de ayuda. Mucho mejor portearle en una mochila que sea cómoda para ambos y que reparta el peso de manera homogénea. ¡Un bebé llevado en una mochila ergonómica pesa mucho menos que en brazos!

- El bebé no va a sudar menos en el carro. La mayoría de las mochilas portabebés son finitas, muy poco calurosas, existiendo además modelos diseñados para las épocas de calor, que evaporan el sudor muy rápidamente.

- El cuerpo humano es un excelente termoregulador y entre bebé y porteador existirá una «sincronía térmica».

- Las mochilas ergonómicas facilitan la lactancia materna. Tu bebé tendrá libre acceso al pecho, pudiendo hidratarse cada vez que lo necesite. Y todo ello mientras tu mantienes las manos libres.

- Porteando a tu bebé podrás estar pendiente en todo momento de su bienestar.

En contra

Estas son las razones que ofrece la doctora Paloma Nacher, neonatóloga y pediatra y coordinadora del Servicio de Urgencias Infantil del Hospital La Milagrosa por las que no recomienda el uso de mochilas portabebés en momentos de olas de calor:

-El calor que emite el progenitor se suma al calor ambiental y, al estar piel con piel, el niño se sobrecalienta.

-El sudor del padre o la madre no es beneficioso para la piel del niño.

-Las correas de sujección del bebe pueden lesionar la piel de este, ya que lleva menos ropa y la piel por el calor esta mas frágil.

-Al llevar al niño acoplado al pecho se pierde la perspectiva de lo que el niño hace o puede necesitar.