Entrevistamos a la sevillana que pasó de modelo «convencional» a ser una de las tops «curvy» más cotizadas
Una noche de otoño caluroso en Sevilla, en la terraza de Gourmet Experience de El Corte Inglés y con Carmen Hierbabuena a los platos. La fiesta de moda del pasado jueves fue la presentación de la colección cápsula que la modelo sevillana Marisa Jara ha diseñado para la firma de moda para mujeres con curas Elena Miró.
Su faceta como una de las modelos curvy más conocidas no deja de darle alegrías en un sector incipiente dentro del mundo de la moda. Comienzan a sonar nombres como la también sevillana Lorena Durán o Ashley Graham entre las más internacionales. Algo está cambiando, aunque sea levemente. Minutos antes de que Marisa Jara salga y vuelva a defender la necesidad de reconocer a la mujer real ante los invitados, responde a las preguntas de Bulevar Sur.
¿Cómo han cambiado las cosas desde que empezaste como modelo adolescente en Sevilla hasta hoy?
Imagínate, ha llovido mucho. Llevo 20 años en el mundo de la moda y cada año va cambiando, a cada momento. Todo ha sido para bien y muy positivo. Llevo desde los 15 años y sí que evidentemente he crecido siendo modelo y la moda forma parte de mi vida, es mi pasión.
Ser una modelo curvy, moda, desfiles para curvies… ¿Ojalá no hubieran falta los adjetivos?
Lo suyo sería eso, yo siempre apuesto por la diversidad de la mujer. Puede que en un futuro se consiga, pero la verdad es que es complicado. Poco a poco las cosas están cambiando, marcas y diseñadores se están concienciando de que las mujeres no tienen solo una talla 36 o 38, la mujer real tiene curvas. De todos modos en España va más lento.
¿Te sientes parte de ese cambio, de esa evolución del sector?
Siempre lo intento y creo que tener imagen pública hace que pueda ayudar a las chicas y alzar la voz dando mi punto de vista. La idea de que la curva es natural de la mujer y es lo que hay. No hay que sentirse insegura ni discriminada por la talla.
¿Cuesta llegar a esa filosofía?
La he ido aprendiendo con el paso del tiempo, por mis propias experiencias que me han hecho que aprenda a quererme, a querer mi cuerpo. Verme de otra manera y ver también la vida de otra manera.
No solo han cambiado las modelos por sus curvas, también por la edad
Es otro ejemplo de esos cambios. Antes una modelo con 25 años ya tenía la carrera más que finiquitada. Y ahora el ser modelo, entre comillas, no tiene edad.
¿Cómo surge este nuevo paso como diseñadora de moda para la firma Elena Miró?
Desde el primer momento en el que me propusieron la idea ni me lo pensé. Elena Miró es una marca con la que me siento identificada, he sido consumidora y la verdad es que estoy encantada. Soy una persona valiente y decidí meterme en el proceso de diseño y ha salido todo fenomenal. Tengo muchas ganas de repetir.
¿Has descubierto una faceta creativa?
Desde pequeña siempre he sido una niña muy creativa. Hace tres años abrí mi propia marca de bisutería, hago mis propios complementos y los vendo online. No me ha costado mucho trabajo ponerme a diseñar moda.
¿Qué dificultades de las chicas con curvas a la hora de vestirse has querido resolver con esta colección?
Siempre ha sido complicado para una chica gordita encontrar prendas adecuadas porque se relaciona con prendas para abuela. Las chicas se han desmotivado y desilusionado con la moda, lo que he querido conseguir con esta colección cápsula es diseñar cómo me gustaría ver a otras chicas con curvas o cómo me veo yo vistiendo. Es una colección para una mujer segura de sí misma, sexy y sensual. Yo he diseñado para una mujer guapa, rotunda, con curvas y sin complejos. Y creo que lo he conseguido.
En marzo de 2017 publicaré un libro sobre mi paso de modelo convencional a curvy
¿Cuáles son tus prendas favoritas?
Siempre opto por un pitillo, americanas, un vestido negro de cocktail con un punto sexy pero elegante y siempre con tacón de aguja. Todo eso lo van a encontrar en esta colección.
¿Algún nuevo proyecto que puedas avanzar?
Acabo de terminar de escribir un libro y creo que para marzo de 2017 se publicará. En él hablo de mi paso de modelo convencional a modelo curvy y de todo lo que ha significado. Eso sí que ha sido complicado, pero es un proyecto que me gusta y me hace feliz.
