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Chelsea Clinton - Van Tine Dennis

Rodrigo Duterte ataca a Chelsea Clinton

No es la primera vez que el presidente de Filipinas causa polémica por sus declaraciones

Madrid Actualizado: Guardar
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«Asumiré la responsabilidad e iré a la cárcel por ustedes si violan a tres mujeres» fue el controvertido comentario que hizo el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, y que enfureció a Chelsea Clinton. La hija del expresidente estadounidense Bill Clinton no dudó en repudiar las declaraciones del mandatario que iban dirigidas a los soldados tras decretar la ley marcial en el país.

Pero, no contento con esto, Duterte contestó a la periodista con otras desafortunadas palabras: «Cuando Bill Clinton se acostaba con Monica Lewinsky y otras chicas jóvenes en la oficina presidencial, ¿cuál fue tu comentario o reacción?». También arremetió contra su madre, la excandidata presidencial Hillary Clinton después de que esta le criticara por la broma sobre las violaciones cometidas por soldados

. El presidente Filipino declaró sólo haber sido «sarcástico» en su discurso, en el cual trataba de dar a conocer su apoyo a las tropas filipinas.

Durante el pasado el presidente visitó a los soldados heridos durante los enfrentamientos con Daesh en el sur del país. Duterte prometió apoyar al Ejército con la declaración de la ley marcial. Desde que el pasado martes comenzará un sangriento asedio contra el grupo Maute, fuerzas vinculadas con el Estado Islámico, en el sur de Filipinas, han muerto al menos 46 personas, 11 agentes de las fuerzas de seguridad y 31 rebeldes.

Duterte mostró su total apoyo a los militares, asegurando que se responsabilizará de las acciones del Ejército, insistiendo en que él mismo se encarcelará si los soldados violan a mujeres o hacen «alguna tontería».

No es la primera vez que el presidente de Filipinas causa polémica por sus declaraciones. En abril de 2016, en medio de la campaña electoral, hizo una alusión a la misionera australiana Jaqueline Hamill, quien fue violada por varios hombres y asesinada en un motín en la cárcel filipina de Davao, en 1989. El jefe de Estado aseguró que lamentaba no haber podido ser el primero en abusar de la joven. «Era tan guapa… ¡El alcalde debió haber sido el primero!», dijo en alusión al cargo que él ocupaba cuando se cometió el crimen.

El líder filipino también es conocido por insultar en público a personalidades como el ex presidente norteamericano Barack Obama, a quien en septiembre de 2016 llamó «hijo de puta», el mismo calificativo que había dedicado meses antes al Papa Francisco.

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