Beckham junto con la pequeña Harper
Beckham junto con la pequeña Harper - REDES SOCIALES

Polémico cumpleaños en Buckingham de la hija menor de los Beckham

Los Duques de York les cedieron el palacio para la fiesta aprovechando una ausencia de la Reina

Londres Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

En víspera del inicio de la visita de Estado de los Reyes de España al Reino Unido, algunos de cuyos hitos se vivirán en Buckingham, el palacio se ha convertido en centro de una polémica creada por la familia Beckham y los Duques de York. El Príncipe Andrés y Sarah Ferguson, divorciados en 1996 pero que continúan conviviendo amistosamente, invitaron la semana pasada a los Beckham a Buckingham para que celebrasen allí el cumpleaños de la menor de sus cuatro hijos, Harper, de seis años.

La cita ha sido divulgada por David y Victoria Beckham y ha causado malestar en el público británico, según traslucen las redes sociales. «¿Por qué la hija de los Beckham sí y la mía no?».

«Si tienes bastante dinero puedes comprar cualquier cosa». «Harper en Palacio. ¿Y qué pasa con las víctimas de la torre Grenfell que lo han perdido todo?».

Acostumbrados al exhibicionismo constante de sus actividades sociales, el exfutbolista y modelo, de 42 años, y su esposa, ex cantante y diseñadora de 43, subieron de inmediato las fotos de la fiesta a sus cuentas de Instagram, donde suman 55 millones de seguidores.

«Afortunada Harper encontrándose en Palacio con una princesa real», escribió el modelo junto una imagen de su hija junto a la princesa Eugenia, de 27 años, octava en la línea de sucesión al trono e hija menor de los Duques de York.

Fuertes críticas

Un antiguo secretario de prensa de Isabel II, Dickie Arbiter, lamenta que se haya utilizado el palacio «como si fuese un parque temático». «Ninguno tenía derecho a estar allí. Lo sucedido devalúa el palacio y lo que significa. Además, ¿por qué los Beckham tienen que recibir un tratamiento especial?», se pregunta en «The Times».

La fiesta se organizó en un amplio corredor de los apartamentos privados del Duque de York en Buckingham. Como en una película de adolescentes, Andrés y Sarah aprovecharon la ausencia de Isabel II y el Duque de Edimburgo, que se encontraban en Escocia. La animadversión del marido de la Reina por la que la prensa inglesa apoda «Fergie» es notoria y reprocha a su hijo que siga viviendo a su lado.

Tras el escándalo, los Beckham y Sarah Ferguson echan balones fuera. El ex futbolista ha emitido esta nota: «Para aclararlo, esto no fue abrir las puertas del palacio para el cumpleaños de Harper. Fue una fiesta de té, a la que fuimos invitados junto a otros huéspedes, mi madre y unos pocos amigos de Harper de la escuela».

La fiesta se celebró la semana pasada, para anticipar el cumpleaños de la niña, que fue este lunes, día en que los Beckham se aprestaron a subir su proeza social a las redes. Harper aparece vestida de Cenicienta y posa en Buckingham sosteniendo un globo rojo. En otra imagen, ella y sus amigas posan con la princesa Eugenia, que sonríe arrodillada para igualar la talla de las niñas.

La niña con sus amigas y la Princesa Eugenia en el palacio
La niña con sus amigas y la Princesa Eugenia en el palacio - REDES SOCIALES

El portavoz de la Duquesa de York alega que solo fue «un pequeño té familiar» y que se trató de «un acto privado». También insinúa que la idea fue de Andrés. Los Duques de York mantienen buen trato con los Beckham desde hace lustros. Cuando Eugenia tenía nueve años fue recibida en el camerino de las Spice Girls, donde se presentó junto a su madre.

Para sosegar el revuelo se ha aclarado que los gastos corrieron a cuenta del Príncipe Andrés y no del bolsillo de los contribuyentes. Un portavoz de Buckingham ha alegado que «de cuando en vez miembros de la familia real que viven en residencias reales invitan a huéspedes a visitarlos en privado».

Antecedentes polémicos

En febrero se filtraron unos correos electrónicos duros para la imagen de Beckham, pues lo presentaban como un trepa social que utilizaba a Unicef para intentar conseguir honores de «sir», que se le resisten. Se trataba de emails privados entre él y su responsable de relaciones públicas y amigo personal, Simon Oliveira, británico de ancestros lusos, de los que se deducía que se aprovechó de Unicef para buscar el título de caballero de la Orden del Imperio Británico (OBE); es decir, para tratar de convertirse en Sir David Beckham.

El deportista recibió en 2002 de manos de la Reina una distinción como oficial de la Orden del Imperio Británico, pero la categoría OBE máxima se le resiste, sobre todo después de que en 2014 fuese acusado junto a otras figuras de evasión de impuestos. Su mujer, Victoria Adams, recibió el pasado abril a distinción también de oficial del Imperio Británico, de manos del Príncipe Guillermo.

El Príncipe Andrés es el hijo más controvertido de Isabel II y se ha visto enredado en escándalos sexuales y de gastos excesivos a cuenta de la administración. La dura prensa tabloide por temporadas se ensaña con él y lo apodan Andy Randy, algo así como «Andresito el Travieso», y Andy Miles, porque cuando era embajador honorario del Reino Unido volaba constantemente en viajes muy caros y sin razón de ser.

Ver los comentarios