La Princesa Amalia, heredera de la Corona de los Países Bajos
La Princesa Amalia, heredera de la Corona de los Países Bajos - AFP

El peso de la Princesa Amalia, a debate en los Países Bajos

Las fotos de la hija de la Reina Máxima con unos kilos de más han desatado la polémica en Holanda

Corresponsal en Bruselas Actualizado: Guardar
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Tiene 13 años y hace unos meses ofreció su primera entrevista televisada junto a sus hermanas. Entonces se reveló como una niña despierta y abierta. Este 2017, sin embargo, parece no tener tregua: ahora han empezado las discusiones políticas sobre la dotación económica que le corresponderá cuando alcance la mayoría de edad, dentro de un lustro.

La vida de la Princesa Amalia, heredera de la Corona de los Países Bajos, se ha desarrollado bajo la estricta tradición de este reino europeo cuyos ciudadanos celebran cada año con una fiesta teñida de naranja la prosperidad que les ha traído la Corona. Salvo que, por primera vez, las redes sociales y los medios de comunicación online han entrado en un campo en el que nadie había osado hasta ahora.

De pronto, se han desatado las burlas y las críticas feroces por su aspecto físico, porque consideran que Amalia es una preadolescente con unos kilos de más.

La política de la Familia Real de los Países Bajos respecto a los medios de comunicación es bastante estricta. Hay una agencia oficial de noticias que da cuenta de los principales acontecimientos que se pueden considerar de interés y, tres veces al año, posan para los fotógrafos en La Haya y en los escenarios donde van de vacaciones, a cambio de que el resto del tiempo no se vean sometidos al acoso de los flashes. Y esta es la primera vez que un miembro de la Familia Real se convierte en pasto de las críticas a causa de su aspecto.

Herencia de sus padres

Es evidente que Amalia ha heredado de su padre, el Rey Guillermo Alejandro, su rostro redondeado y que también parece haber recibido de su madre, la Reina Máxima, la corpulencia y esa tendencia a engordar. En su infancia argentina, la hoy Reina de Holanda era conocida precisamente por ser una niña «grande» en todos los sentidos, cuando ahora en su madurez es una mujer esbelta y equilibrada.

Pero ha bastado la exhibición de varias fotografías de Amalia para despertar un aluvión de comentarios. Algunos hablan abiertamente de aspecto «poco saludable» y se preguntan si sus padres prestan la debida atención a la alimentación de su hija mayor.

Todo empezó con el habitual posado en la estación austriaca de esquí de Lech. Amalia apareció vistiendo un anorak que había usado su madre cuando estaba embarazada de su hermana Adriana, hace ahora 9 años. Lech es el lugar donde pasa habitualmente sus vacaciones de invierno toda la Familia Real y, también, donde Friso de Orange, el hermano del Rey, sufrió un accidente que terminó con su vida en 2013. El anorak de la Princesa y su aspecto fueron el centro de atención de la prensa y no precisamente por el hecho de que la Casa Real ahorre aprovechando prendas usadas que pasan de un miembro a otro de la familia.

Además, Amalia había sido fotografiada en Londres junto a sus padres en la boda de la diseñadora de joyas griega Marianna Goulandris el pasado 4 de febrero, que reunió a no pocas personalidades de todo el continente. La joven aparecía junto a sus padres en un contraste especialmente llamativo respecto a su madre Máxima, que a sus 45 años luce una silueta espléndida.

Criticar a la Princesa por su aspecto físico es un hecho que no se conocía en la historia del país. Algunos periodistas han intentado salvar el debate declarando a Amalia como «la niña mas bonita de Holanda», pero eso no resuelve el tema. En las sociedades desarrolladas es relativamente corriente que haya niños con sobrepeso y es probable que no sea la única que padece este problema en su clase del colegio de La Haya al que acude con normalidad.

Lo que es nuevo es que esta circunstancia relativa a la que será la futura Reina se haya trasladado al debate público. Además, en Holanda, donde existe una tradición de que los monarcas abdiquen más o menos cuando se cumplen tres décadas de reinado, Amalia sabe que será la monarca de su país más o menos cuando tenga la edad que tiene ahora su madre. En este sentido los holandeses, no deberían preocuparse por ello, contemplando las imágenes de la infancia de Máxima y de la mujer que es hoy.

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