Maluma: «Hay músicas mucho más machistas que el reggaeton y nadie dice nada»

Con 22 años, este futbolista colombiano reconvertido en cantante es el artista latino con más seguidores en Internet

Madrid Actualizado: Guardar
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Ni Shakira, ni Maná, ni Enrique Iglesias ni el todopoderoso Daddy Yankee tienen tantos followers en las redes sociales como Juan Luis Londoño Arias, un joven colombiano de 22 años que ha revolucionado ese género tan ambiguamente llamado «urbano» (en el que reggaeton, hip-hop y R&B contemporáneo andan juntos y revueltos). Tras abandonar su prometedora carrera como futbolista en el Atlético Nacional de Medellín, se lanzó al estrellato grabando canciones sin parar y participando como coach en «La Voz Kids» (a pesar de que no le gusta la televisión), y ahora tiene más de 15 millones de seguidores en Instagram, 20 en Facebook, 3 en Twitter y 800 millones de reproducciones en Youtube. Esta semana ha iniciado su conquista europea visitando por primera vez nuestro país, donde dará varios conciertos en octubre dentro de su gira «Pretty Boy Dirty Boy World Tour».

— Una clave del éxito del reggaeton es la colaboración entre artistas, ¿no cree? En otros géneros no es tan habitual.

Sí, eso es verdad. Hay mucha facilidad para colaborar con otros artistas, y además el reggaeton se puede mezclar con casi todos los géneros musicales, y eso es lo que lo ha llevado a tener tanta resistencia.

— ¿No hay ningún tipo de rivalidad entre ustedes?

Yo no tengo rivalidad con nadie. Pero no sé si otros tienen rivalidad conmigo ¡jajaja! Yo soy buena onda, paz y amor para todo el mundo.

— De hecho mantiene distancia con el estilo de otros artistas, más polémicos por sus textos cargados de connotaciones machistas.

Sí, es diferente. Yo creo que por eso me he diferenciado. De todas formas, hay otros géneros musicales que ponen a la mujer en una situación mucho peor, pero nadie dice nada porque esas letras no son tan claras. El problema es que los artistas urbanos dicen las cosas como son. No expresan opiniones, sino realidades. Es como si acusan de machista a un director de cine que hace una película en la que se reflejan actos machistas.

— ¿Qué significa para usted que un tuit en el que solo dice «Buenas noches» sea retuiteado cientos de miles de veces?

Me sorprende. El Twitter ya no lo manejo tanto porque Instagram y Snapchat me han dado una comunicación más directa con mis fanáticos. Pero cuando he seguido Twitter me he dado cuenta de la fuerza que tiene esa red social, y detalles como el que has mencionado lo dicen todo. Las redes se han apoderado de la industria musical.

— Usted que tiene tanto éxito en YouTube, ¿qué opina de su gestión de los derechos de autor?

Es el tema de nunca acabar. Siempre habrá gente de acuerdo y gente en desacuerdo, pero al fin y al cabo es una de las plataformas más grandes de música, y ha lanzado a muchos artistas, entre ellos yo mismo. Entonces, pague mucho o pague poco, la realidad es que es una plataforma digital muy fuerte, y que da visibilidad a los artistas.

— Entonces entiendo que considera que pagan de una forma justa.

Prefiero no opinar al respecto.

— ¿Qué piensa de la polémica que hay entre James y el Real Madrid? ¿Colombia está cabreada con la prensa española?

Sí, sí. Como futbolista, creo que es mucha presión estar en un plantel como el Real Madrid. No es nada fácil, y James tiene mucha presión como jugador. Si le dieran más oportunidades, podría demostrar que es un grande del fútbol mundial.

— Imagino que sabe que el narcotraficante Pablo Escobar está muy de moda por una serie de televisión. ¿Qué pensó cuando su amigo, el artista J. Álvarez se presentó en su ciudad, Medellín, con una camiseta que llevaba su rostro?

Uno de los políticos más importantes de Medellín le dijo que era una falta de respeto, que si él sabía lo que llevaba puesto. Fue por ignorancia, J. Álvarez no sabía lo que representa Pablo Escobar para Medellín. Fue el terrorista más grande de la historia de Colombia y él no se dio cuenta de eso. Yo le quiero mucho y lo respeto, y sé que se dio cuenta de su error.

— ¿Es cierto que rechazó subir a recoger un premio en Panamá? Lo he leído en la prensa.

Es mentira, claro que es mentira. Cómo iba a rechazar un premio, quién va hacer eso… Estas cosas cabrean. Por crear noticia y crear polémica, a los artistas nos tratan como si no fuéramos humanos. Es importante que la gente sepa que somos gente real, que todo artista tiene un ser humano detrás.

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