Luis del Olmo sobre su exadministrador: «Espero que pase cincuenta años en la cárcel»

Sin perder la compostura pero con toda la fuerza de sus palabras, el periodista Luis del Olmo volvió a desahogarse ayer ante los medios de comunicación a la salida de la sala tercera de la Audiencia de Barcelona donde se celebró el primer día del juicio por el caso del administrador Rogelio Rengel. La Fiscalía pide para él doce años de cárcel por un delito continuado de apropiación indebida, alzamiento de bienes y falseamiento de cuentas para desviar fondos de varias sociedades que administraba, entre ellas las del periodista Luis del Olmo y su esposa. « Tenía mi absoluta confianza, hasta las llaves de mi casa. Nunca le pedí cuentas de los bienes que me administraba porque era una relación más allá de lo normal.

Rogelio ha sido como un hermano para mí y lo que me ha hecho no tiene nombre. Se ha quedado con el dinero que tenía ahorrado para el día de mañana de mis nietos», se quejaba el periodista tras enterarse y confirmar que su brazo derecho, el hombre que manejaba todos los hilos económicos, le había estafado una cifra que podría rondar los quince millones de euros. «Solo espero que le caigan 50 o 60 años de cárcel», comentaba Del Olmo a la salida del juzgado consciente de que esa pena tan larga es imposible, pero con la desesperación de saber de antemano que su exadministrador se va a declarar insolvente por lo que duda mucho que pueda recuperar parte de ese capital.

Hay que recordar que fue en el año 2012 cuando el periodista se enteró de lo que ocurría con sus finanzas tras ponerse en contacto con él la esposa de Rengel. «Me ha estafado a mí y a su propia familia», comentó entonces. Rengel se divorciaba de su mujer y empezaba su calvario al destaparse todo el lío económico que había organizado en los últimos años. Ayer reconoció ante el juez que había desviado 70.000 euros de una sociedad y 3,5 millones de euros de otra, pero que los había destinado a financiar el proyecto «Don Balón», una revista digital que no dio el resultado esperado. «Se aprovechaba cuando me encontraba en pleno directo con mi programa de radio para decirme que tenía que firmar unos documentos. Yo ni los leía porque siempre que me lo pedía era cuando tenía al micrófono algún invitado importante y porque confiaba plenamente en él», ha declarado Del Olmo, quien ha tardado mucho en recuperarse del golpe emocional tras conocer una traición de este calado «en alguien tan cercano a mí y mi familia». «Mi dinero se lo ha gastado entre otras cosas en financiar las impresionantes fiestas que daba con la revista como el homenaje a Messi», se lamenta el periodista que durante todos estos años no había vuelto a encontrarse con Rogelio hasta ayer por la mañana en la Audiencia.

Según el letrado del administrador, su cliente llegó con serios problemas de salud, especialmente auditivos, pero con facultades suficientes para decir que la cantidad que se estaba barajando no era de 15 millones y que no los había destinado a su uso personal. Sin propiedades a su nombre ni cuentas secretas que le hayan podido encontrar en estos años, Rogelio se enfrenta a una pena que podría llevarle a la cárcel y una sanción que difícilmente podrá hacer frente salvo que aparezcan nuevos datos sobre un asunto que ha desestibilizado la retirada del veterano periodista « el hombre que más dinero ha ganado en la radio», como él mismo ha confesado.