Leo Messi y Antonella Roccuzzo
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Antonella Roccuzzo, el primer y único amor de Leo Messi

El delantero argentino por fin se casa con su novia de toda la vida, madre de sus dos hijos

Corresponsal en Buenos Aires Actualizado: Guardar
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Parece que esta vez el rumor y el sueño se harán realidad al mismo tiempo. Todo indica que es cierto que no será antes de fin de año pero sucederá el próximo. La boda, el bodón de Leonel Messi y Antonella Roccuzzo, estaría en marcha para el 2017 y más bien, tirando para mediados antes que para finales.

Al menos, así lo publican y lo dan por hecho en Argentina. La noticia la dio Juan Pablo Varsky, periodista deportivo que huye de provocar escándalos y evita alzar la voz para proclamar sentencias de muerte, cuando las cosas van mal para la selección albiceleste y en especial para Lío, como conocen a Messsi en Argentina. Lo dijo en su programa de radio, «No somos nadie», y lo reprodujeron la mayoría de los medios de comunicación sin dejar espacio para la duda.

Roto el secreto mejor guardado de «la pulga», es probable que los detalles del acontecimiento no sean tan fáciles de conocer y quizás, haya más sorpresas de las imaginadas.

La Navidad está a la vuelta de la esquina y Messi (29 años) y su familia, suelen pasar, las fechas emblemáticas, en tierra argentina. Luego, la pareja, a veces, procura hacerse alguna escapada a Brasil o a cualquiera de la playas paradisíacas del Caribe o de otros lugares del planeta.

En apenas unas semanas ya estaremos en el 2017 y será entonces cuando empiece la cuenta atrás para dar el «sí, quiero». Verano austral en enero, el calor se calma en las aguas del el río Paraná o en la «pileta» (piscina) si estás en Rosario, ciudad natal de los padres de Thiago y Mateo. Es aquí, a unos 300 kilómetros de Buenos Aires, donde la prensa da por sentado que se celebrará la boda del jugador de fútbol más importante de este siglo. Del pasado todavía hay división de opiniones entre Diego Armando Maradona y él. Donde todos coinciden es en que Messi supera al «pelusa» en humildad, buen corazón y salud. Tres cosas que cuida con tanta delicadeza como a los suyos.

Interpretada la palabra de Varsky como la palabra de dios en temas de futbol, las conjeturas sobre la lista de boda se multiplican. La mayoría imagina al plantel del Barcelona presente aunque algunos se preguntan qué pasará con Gerard Piqué y Shakira. La colombiana y Antonella, según las revistas del corazón, no parece que estén en la misma sintonía y, aseguran, procuran estar juntas lo menos posible y en ocasiones inevitables. Ésta, sería una de ellas. No obstante, Shakira, con fama de buena gente y generosa, nunca haría algo que pudiera molestar a los futuros recién casados y hasta podría animarse a cantar alguna canción. De producirse ese escenario imaginario, quizás se diera otro que hiciera de la fiesta una boda universal en cuanto al número de estrellas del firmamento artístico que podría haber entre sus invitados. Con Neymar y Luis Suárez, vecinos en España y en Sudamérica, como fichas fijas en el enlace de Rosario, algunos recuerdan que al brasileño le une una amistad muy estrecha con Justin Bieber y podría llevarlo como regalo de bodas si no lo invita directamente Lío. El cantante canadiense estuvo recientemente en el Camp Nou y parece que se sintió como en su casa sobre el césped y con el resto del plantel.

El asunto familiar parece que está más claro. Nadie se quedará fuera. Padres (Jorge y Celia), hermanos (Matías, Rodrigo y Marisol) más una caterva de sobrinos, tías y otros parientes. En definitiva, todos los que se apellidan Messi y Roccuzzo (más los políticos) estarán allí.

Otra cosa y esto es un enigma, es quiénes serán los testigos. La pareja conserva amistades sólidas desde su infancia y guarda celosamente su intimidad. Son pocos los que los pueden identificarlos sin caer en el error. Posiblemente, además de los hermanos estén algunos de ellos o compañeros del Barca.

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De niños

Leonel y Antonella se conocieron de niños. Cuando disfrutaban de ese primer amor, el chaval que se convertiría en «el crack» del Barcelona y del mundo, emprendió rumbo a España. Apenas tenía 13 años pero el corazón de Messi había elegido. El reencuentro se produjo en el 2008 con Lio hecho un hombre. No se separaron más. Ahora, son mucho más que dos, en sentido figurado y real. En su vida, están los hijos y un número desconocido de asesores de imagen, financieros (aquí no estuvo fino y Hacienda le metió un gol de varios millones de euros) y otros especialistas que siguen sus movimientos, como una sombre, allá donde vaya. Si los novios se ponen a invitar a todos los que están, más o menos, cerca suyo Rosario no va a tener suficientes hoteles para ellos.

Si atendemos al perfil de Messi, lo cierto es que se inclina más a las celebraciones íntimas que a otro tipo de convocatorias pero el matrimonio, como el tango, es cosa de dos y Antonella, como la mayoría de las mujeres argentinas -y de buena parte del resto del mundo-, estaría pensando que sólo se casa una vez y querría echar las campanas al vuelo. El tiempo dirá si lo hace o la boda, difícil imaginar, pasa desapercibida.

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