Los polémicos viajes de la alcaldesa

Los viajes de Manuela Carmena al extranjero en calidad de alcaldesa son garantía de que hará confesiones polémicas. Ayer, coincidiendo con la inauguración de la feria más importante de Madrid, Fitur, la regidora se despachó a gusto con el poder judicial y los medios de comunicación desde Chile. Aprovechando su participación en la III Cumbre de Agendas Locales de Género, donde fue invitada para dar su visión sobre la mujer, vino a decir, en declaraciones recogidas por Efe, que existen «dos poderes en la sombra: el judicial y el de los medios de comunicación», y que en muchas ocasiones ambos entorpecen el cambio cultural en la implementación de las políticas locales.

Se notó la ausencia de la máxima representante de Madrid en Ifema, donde la Reina inauguró la Feria Internacional del Turismo, acompañada de la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, y la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa.

Fue la delegada de Equidad, Empleo y Derechos Sociales, Marta Higueras, la que acudió como alcaldesa en funciones, secundada por el coordinador general de Alcaldía, Luis Cueto. Fueron los encargados de recibir a Doña Letizia y hacer un recorrido por el espacio expositivo de la capital. Carmena continuará mañana en el país sudamericano.

Fue en julio cuando la exjuez inició su primer viaje al extranjero tras su aterrizaje en Cibeles. Fue una de las invitadas a participar en un congreso sobre cambio climático y esclavitud en el Vaticano. Estaba organizado por la Academia Pontificia. De aquella cita siempre quedará una reflexión inesperada. En palabras textuales de la regidora, invitó a pensar en «por qué uno se va de putas».

A finales de agosto, tras tomarse una semana de vacaciones con su familia en Cádiz, Carmena se fue a Buenos Aires (Argentina) para promocionar su libro «Por qué las cosas pueden ser diferentes. Reflexiones de una jueza». Fue polémico porque inicialmente su departamento de Comunicación no quería informar sobre su agenda al tratarse de un viaje «personal». Pero su reunión con la entonces presidenta de la República, Cristina Fernández de Kirchner, obligó a la responsable madrileña a reconocer que su marcha tenía carácter oficial al «representar al Ayuntamiento» madrileño.

A principios de diciembre, su homóloga en París, Anne Hidalgo, convocó a la máxima exponente de Ahora Madrid a formar parte de los asistentes en la Cumbre del Cambio Climático (COP21). En una de sus comparecencias ante los medios de comunicación en la ciudad gala, Carmena avanzó que en la capital española se estaba pensando en una iniciativa «divertida» que consistía en que los niños participasen en un concurso de recogidas de colillas o papeles del suelo y darles premios. Su anuncio se aseguró un hueco en los medios españoles y la carga de los dos partidos de la oposición, el PP y Ciudadanos. La portavoz de C’s en Madrid, Begoña Villacís, que visitó ayer la Feria Internacional del Turismo, criticó las palabras de la regidora: «La oposición, que tan poco le gusta a algunos, los jueces, los periodistas y los ciudadanos son y están, en democracia, en el deber de cumplir el control a todo gobierno».

No es la primera vez que Manuela Carmena critica el papel de algunos medios de comunicación. Una de sus primeras iniciativas fue sacar Versión Original, la web que «corrige» las informaciones de medios que su equipo considera.