Varios pasajeros entran y salen de un vagón, durante la última jornada de paros
Varios pasajeros entran y salen de un vagón, durante la última jornada de paros - MAYA BALANYA

Metro achaca la nueva convocatoria de paros al despido de un maquinista

El Sindicato de Maquinistas anuncia una nueva huelga al considerar que el Ejecutivo regional incumple su palabra tras una reunión «fallida» sin el consejero delegado del suburbano

MADRID Actualizado: Guardar
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Metro de Madrid ha achacado al despido de un maquinista por «abandono en el servicio y desobediencia en el trabajo» la nueva convocatoria de paros parciales del Sindicato del Colectivo de Maquinistas de Metro de Madrid, fijados para el próximo 10 de abril y los lunes siguientes de forma indefinida.

El Sindicato ha anunciado los nuevos paros, que tendrán lugar en una única franja horaria que irá de 5:50 a 8:30 de la mañana. El motivo principal alegado es «la falta de palabra que han demostrado tener tanto el Consejero Delegado de Metro de Madrid como la presidenta de la Comunidad Cristina Cifuentes».

No obstante, a juicio de la compañía, esta nueva convocatoria coincide con el despido causado «tras haber desalojado a los viajeros del tren contraviniendo la normativa laboral», el segundo efectuado debido a estos motivos, y con la «reducción de permisos retribuidos por asuntos sindicales» a causa de una norma interna.

Metro defiende que era su obligación despedir al maquinista, que «decidió dejar de prestar servicio» contraviniendo la normativa laboral interna de Metro Madrid que obliga a un maquinista a continuar conduciendo el tren hasta la cabecera de línea cuando no se dispone en ese momento de un relevo en otra estación anterior.

La empresa explica que el maquinista transgredió «la buena fe contractual», generando un perjuicio en los viajeros y provocando «pérdida de confianza por parte de la empresa». Los paros, de los que Metro destaca que afectan a la hora punta por estar convocados desde el inicio del servicio hasta las 8.30, son «injustificados» a juicio de la compañía del suburbano, que asegura que en la anterior protesta, entre febrero y marzo, el bajo seguimiento, de entre el 5 y el 10 % según Metro, motivó la desconvocatoria.

Servicios mínimos

Por su parte, la organización sindical, que representa a la mayoría de los 1.600 maquinistas de la red, explica que la anterior huelga «fue boicoteada por parte de Metro de Madrid» debido a «servicios mínimos abusivos» y a que «centralizó todos los trenes en las líneas con más afluencia para dejar la periferia más desprotegida». Entonces, los servicios mínimos fijados por el Gobierno de Cristina Cifuentes ascendieron al 65 %.

Los maquinistas reclaman la categoría laboral de «Maquinistas de Tracción Eléctrica» para que queden acreditadas ante la Seguridad Social las enfermedades que se derivan de su puesto de trabajo.

Hasta ahora, denuncian, son considerados «personal no cualificado» pese a pasar «sucesivas pruebas y tener una alta responsabilidad diaria». En el comunicado niegan de forma expresa que pidan mayor remuneración, vacaciones o anticipar su jubilación.

Para el sindicato, es un «engaño manifiesto» el no haber podido mantener una reunión con el consejero delegado de Metro Madrid, Borja Carabante, y denuncian que no les contestan a las cartas que envían. Muestran además su disposición «24 horas al día» para resolver el conflicto, aunque exigen no ser «engañados».

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