Causapié se sube ahora al carro de Susana Díaz

Donde dije Tomás Gómez o Pedro Sánchez, quise decir Susana Díaz. Estos son, muy resumidos, los dos caminos que han seguido en los últimos tiempos varios dirigentes socialistas madrileños que en su día cerraron filas con Tomás Gómez o Pedro Sánchez y que hoy, después de haber sido polos opuestos en el PSOE, se unen en una mezcla dificilmente concebible meses atrás para apoyar la candidatura de la presidenta andaluza.

En este equipo que coordinará los actos madrileños de apoyo a Díaz en la carrera hacia la secretaría general del PSOE figuran «tomasistas», como Antonio Miguel Carmona, Juan Segovia o Maru Menéndez, y «sanchistas», como Purificación Causapié o José Cepeda, que ahora parecen no serlo tanto.

Cepeda, hombre de confianza de Pedro Sánchez, llegó a acompañar al último líder de los socialistas en su ronda inicial de presentación por los medios de comunicación de este país mientras que Causapié, por su parte, fue la elegida por Sara Hernández —secretaria general del PSOE-M— a instancias de Sánchez para sustituir a Antonio Miguel Carmona en el cargo de portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid.

El caso Carmona

Y con Carmona se va a ver las caras —amén de por los pasillos del grupo socialista o los plenos de Cibeles— Causapié, después de haber ocupado su puesto. La relación entre ambos no es precisamente buena, después de que, apenas mes y medio como portavoz municipal, Sánchez le fulminara del cargo para sustituirlo por su número 2 en las listas. El exsecretario general le descabezaba meses después de defenestrar a su íntimo amigo, Tomás Gómez del PSM.

El delfín y la mano derecha de Gómez

También de Tomás Gómez pero sin pasar por la fase de apoyo a Pedro Sánchez son Juan Segovia quien, avalado por el propio Gómez, perdió las primarias del PSOE-M con Sara Hernández, la candidata de Pedro Sánchez; o Maru Menéndez, secretaria de organización de los socialistas madrileños en la época de Gómez.

Su paso adelante por Susana Díaz es más coherente, ya que siempre se han mostrado contrarios a Sánchez y por ello es bastante lógico que ahora apoyen a una candidatura rival a la del antiguo secretario general del PSOE, como es la de la presidenta de Andalucía. Queda por ver cómo mezcla esta macedonia de socialismo que, si fuera por los precedentes municipales, no termina de encajar. En sus manos está desde hoy la imagen de Susana Díaz en Madrid.