StemLab, o el entusiasmo de explorar

Mundos virtuales, misiones al espacio o instrumental de laboratorio construido con impresión 3D; los centros gallegos exhiben su talento científico y su vocación digital

Feijóo y Pedro Duque esta mañana conociendo los proyectos de los escolares MIGUEL MUÑIZ

ROCÍO LIZCANO

Los alumnos del IES David Buján de Cambre están inmersos en la construcción de un equipo completo de laboratorio a partir de la impresión 3D y el aprovechamiento de materiales de desecho. Imanes recuperados de discos duros o ventiladores de ordenadores obsoletos obtienen una nueva vida y contribuyen a engrosar el instrumental de laboratorio del centro. Carla y Lucía, alumnas de 3º de la ESO, ejemplifican en un dato el potencial del proyecto: las centrifugadoras de laboratorio que han construido funcionan igual que cualquier otra, pero a un precio de 54 euros frente a los 187 del mercado convencional.

Como otra veintena de centros escolares gallegos, los alumnos del David Buján tuvieron ocasión de presentar esta mañana sus proyectos de ciencia y tecnología en la primera feria educativa STEM (siglas en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) de Galicia y de hacerlo ante un invitado de excepción: el primer astronauta español . Acompañando al presidente de la Xunta y al conselleiro de Educación, Pedro Duque (Madrid, 1963) se detuvo en los expositores repartidos en el Palacio de Congresos de Santiago para escuchar las explicaciones de los alumn os . Antes, en una breve intervención en el auditorio, el ingeniero aeronáutico les ha exhortado a perseguir sus sueños y a cultivar su vocación científica porque, dijo, «lo más divertido que hay en el mundo es saber cosas y hacer cosas». «No hemos hecho más que rascar el principio y necesitamos un montón de científicos e ingenieros», ha alentado a los alumnos el astronauta de la Agencia Espacial Europea (ESA).

En su recorrido por la feria, Duque ha podido adentrarse en los mundos virtuales diseñados por los alumnos de Primaria del CEIP Ponte dos Brozos de Arteixo, jugar con el «Escornabot» a un quiz sobre clima y meteorología preparado por el CEIP de Noalla-Telleiro de Sanxenxo y conocer de la mano de Laura y Julia los detalles de su estación de meteorología o manejarse en un videojuego utilizando mandos alternativos construidos por los alumnos del CPI Plurilingüe Virxe da Cela de Monfero a partir de pinzas de cocodrilo y materiales conductores como el papel de aluminio o plátanos y manzanas. «El kiwi por ejemplo no sirve, se necesita algún conductor, como el grafito del lápiz, eso también vale», han explicado Alicia y Damián. El dispositivo PeixeMol, diseñado y construido por el IES Daviña Rey de Monforte para calcular el caudal de un río, el hospital de robots educativos que —de modo totalmente gratuito— ofrecen los alumnos del ciclo de Mantenimiento y Electrónica del CIFP Ferrolterra para reparar los dispositivos que emplean en las aulas profesores de la comarca (en el último curso han pasado por su taller más de 60 dispositivos, explica Víctor) o la Misión a Marte planificada por los estudiantes del IES Xunqueira II de Pontevedra son otros de los proyectos presentados en esta feria organizada por la Consellería de Educación con el fin de visibilizar el trabajo desarrollado por los centros en el marco de la Estratexia Galega para a Educación Dixital Edudixital 2020 y de la filosofía STEM.

El rico es el que sabe

«Vosotros vais a poder inventar cosas que hoy ni siquiera soñamos», ha dicho Alberto Núñez Feijóo a los alumnos congregados en StemLab Galicia a quienes ha invitado a no perder la curiosidad y las ganas de saber porque «la diferencia entre una persona y otra no está en lo que tiene, sino en lo que sabe». «Eso no se puede comprar y ahora estáis en el mejor momento para invertir en lo que de verdad vale», aconsejó el presidente de la Xunta. «Nos gustaría que seáis lo que queráis ser», ha incidido Feijóo, subrayando en el camino recorrido en los últimos 50 años, desde la escuela «de pizarra y pizarrín» que él, como Pedro Duque, conoció, a las aulas de hoy. «En mis años de colegio cuando decías que querías ser astronauta te caía una colleja», ha señalado el astronauta, contraponiendo el sistema actual en el que «cualquier niño, independientemente de dónde haya nacido, puede dedicarse a la profesión que le parezca».

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