Astillero de Navantia en Fene
Astillero de Navantia en Fene - EFE
Sectores económicos

Navantia gestionará la construcción de tres destructores para Australia

El constructor público español desplazará a su equipo de diseño a los astilleros de Adelaide

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El Gobierno australiano ha vuelto a confiar en Navantia para la gestión de su flota y la compañía perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) asumirá el diseño del proyecto de la construcción de tres destructores, basados en los modelos F-100 de la Armada española y de cuya ejecución se encargaron los astilleros ferrolanos.

El contrato, firmado ayer en la ciudad de Sidney en un acto que reunió a representantes del Ejecutivo australiano, de los astilleros ASC, de la empresa especializada en armamento y soluciones tecnológicas militares Raytheon y al presidente y director de la empresa española en el país, José Manuel Revuelta y Francisco Barón, es parte de la «Estrategia de Reforma de los AWD» que contempla el apoyo de Navantia en la materialización de estos buques en el menor plazo posible.

El proyecto, antes en manos de AWD Alliance, sometido a una auditoria confirmó demoras (de más de dos años) y la necesidad de una inyección a mayores de 799 millones de euros, de ahí que se optase por buscar un nuevo gestor.

En este escenario, el constructor público español se encargará de buscar soluciones para mejorar los problemas detectados durante la construcción. Entre ellos, los bloques de las zonas de quilla, proa y popa fabricados en los astilleros de Ferrol y Fene y enviados por mar hasta Australia para su ensamblaje.

En virtud de este proceso de licitación «limitado», tal y como indicó el Gobierno australiano a través de un comunicado, Navantia trasladará a un equipo de diseño hasta los astilleros de Osborne, un complejo industrial situado en Adelaide, al sur del país.

«El hecho de que hayan depositado la confianza para que asumamos la construcción de los tres destructores que se está llevando a cabo en Adelaide es una señal más de la confianza que tienen en Navantia», recoge Efe de las declaraciones de Revuelta.

Y no le falta razón dado que en los últimos años, con más intensidad desde 2007, Australia se ha convertido en el principal cliente de Navantia respecto a la carga de trabajo. Hasta tres contratos le han permitido trabajar en menor o mayor medida en la construcción de estos destructores. La participación de la empresa en los proyectos constructivos motivó la ocupación de la oficina técnica, sobre todo en las instalaciones ferrolanas. Además, el pasado vienes entregó a la Armada del país el segundo de los portaaeronaves encargados (buques anfibios del tipo «LHD») y que se sumaba a las doce lanchas de desembarco realizadas en los astilleros de la Bahía de Cádiz.

Trabajos que, en opinión de Revuelta abren la posibilidad de tener «importantes oportunidades» de cara a los programas de modernización que se van a llevar a cabo por parte de la Armada y el Gobierno de Australia.

Petroleros de Ondimar

Este último acuerdo se suma al recientemente cerrado entre Navantia y Ondimar para la estructura financiera de dos de los cuatros petroleros convenidos en mayo entre el astillero público y la naviera vasca. Cuatro buques, tipo Suezmax, que supondrán para los astilleros de Ferrol y Cádiz 3 millones de horas de carga de trabajo que se repartirán también entre la industria auxiliar de ambas zonas. Hay intención de suscribir una quinta unidad en 2016.

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