El presidente de la Xunta y del grupo parlamentario del PP, Núñez Feijóo, ayer
El presidente de la Xunta y del grupo parlamentario del PP, Núñez Feijóo, ayer - EFE

Los diputados del PPdeG dejarán su acta si son procesados judicialmente

En caso de que se les abra investigación pondrán su cargo a disposición del partido, que decidirá sobre su futuro

Santiago Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La bancada popular en el Parlamento gallego volverá a contar esta legislatura con 41 diputados, idéntica representación a la ya finalizada, y desde Galicia Alberto Núñez Feijóo quiere apostar no solo por ejercer una labor de Gobierno lo más acertada que sus capacidades le permitan, sino que además pidió a sus diputados que contribuyan a « devolver el prestigio perdido a la política». Así, los representantes del grupo mayoritario de la Cámara firmaron ayer un «compromiso ético» de cinco puntos que va «más allá» de las exigencias actuales. «Cumplir estrictamente con la legalidad vigente es lo mínimo exigible para un representante público», subrayó Alberto Núñez Feijóo para ilustrar la necesidad de un documento como este.

Con esta firma, los inquilinos de los escaños conservadores se comprometen a notificar de inmediato al grupo parlamentario cualquier inicio de un procedimiento legal que se pueda derivar en la acusación de la comisión de un delito por su parte.

En caso de alcanzar la condición de investigados, deben poner su cargo a disposición del partido, para que sean los órganos internos de este los que decidan sobre su futuro. Además, si el acusado llegase a resultar procesado con cualquier tipo de medidas cautelares, quedaría «inmediatamente suspendido de militancia» y debería cesar como cargo electo autonómico.

Conflictos de intereses

En un sentido similar, los integrantes de la mayoría anuncian que se abstendrán de realizar cualquier actividad que pudiese suponer «un conflicto de intereses» con su desempeño en el legislativo, de este modo deberán separar «decididamente» los ámbitos público y privado. Del mismo modo, evitarán recibir tratos de favor «más allá de los inherentes a su condición de diputados» según marca la legalidad vigente, y no aceptarán regalos que excedan «por importe o causa» a los «usos y costumbres sociales», que la normativa autonómica fija para los altos cargos de la Xunta en un valor máximo de 90 euros, menos de lo que contempla la Comisión Europea, que marca el límite de los presentes en 150 euros.

Los populares también harán este mandato bandera de la austeridad, y pretenden predicar con el ejemplo desde las butacas de la antigua Escuela de Veterinaria compostelana. Así prometen hacer «un uso responsable» de los medios materiales que la institución pone a su disposición, con especial atención a los dispositivos electrónicos y, si fuese el caso, a los coches oficiales.

Los compromisos restantes están relacionados con la conducta pública en cuanto a procurar no dañar la imagen pública del Parlamento, aunque no se salten la Ley; así como promueven la asistencia a las comisiones y plenos que tenga fijadas, como exige su puesto.

«Como una minoría»

Núñez Feijóo presidió la primera reunión del nuevo grupo, y comenzó poniendo deberes. Además de prometer trasladar la «estabilidad» que salió de las urnas, instó a sus diputados a que negocien las medidas que quieran sacar adelante «como si estuviésemos en minoría», con la intención de que se consigan grandes acuerdos para consolidar reformas a largo plazo. «Las manos tendidas siempre son más fuertes que las trincheras», ilustró.

Para conseguir su objetivo, el líder popular deseó encontrar en frente a una oposición «responsable y constructiva» que «no se encuentre instalada en el ‘no’ permanente, y que utilice el ‘depende’». En este sentido, solicitó al ala izquierda del arco parlamentario que deje de lado las maneras que se pudieron ver en la legislatura pasada, sobre todo de la mano de Xosé Manuel Beiras y sus discípulos de la ya extinta AGE.

En definitiva, el presidente, listo ya para afrontar su tercera etapa al frente de la administración, resumió su declaración de intenciones en esperar «una legislatura útil», en la que los populares aprovechen su amplia mayoría para «ser un Gobierno para todos los gallegos, no solo para los votantes del PP».

Ver los comentarios