Una deuda que se convirtió en premio
García Teijeiro es un firme defensor de la poesía para educar a los niños y «Poemar o mar» es una obra para ellos
La importancia de la poesía es algo clave para el nuevo ganador del Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil. El vigués Antonio García Teijeiro , que todavía se muestra «sorprendido y feliz», se alzó hace unas semanas con esta distinción concedida por el Ministerio de Educación Cultura y Deporte por su libro «Poemar o mar». En su poesía destaca la figura y el protagonismo del mar que está presente de alguna manera en la mayoría de sus obras. Sus trabajos van dirigidos a un público infantil y juvenil ya que para este autor la poesía es fundamental a esas edades y «desde hace tiempo no se habla de la poesía de los niños» , explica.
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Como profesor retirado, García Teijeiro, tiene bastante claro que «un niño no se puede formar sin poesía» . A pesar de ser un género que exige un esfuerzo, hay una necesidad clara de que tenga más presencia en su formación. Pero según el autor hay un «miedo de los adultos a la poesía» y esto debe cambiar. Los más jóvenes «necesitan un mediador que les enseñe este género» ya que, según el vigués, es «enriquecedor» para ellos. Durante sus años de docente puso esta idea en marcha y asegura que «se ven resultados», además de que a los niños les gusta. Por todo esto, trata de crear «buenos textos» así como «libros hechos con cariño y respeto» que puedan llegar a todos y con temas que despierten la curiosidad de los más pequeños, aunque también escriba para llegar a los adultos. Este es el caso de su libro premiado y que forma parte de una trilogía, creada a raíz de la idea de «un amigo». El mar, cómo no, siempre protagonista.
Una deuda con el mar
La respuesta del autor al porqué de una trilogía dedicada al piélago es meridianamente clara. «Tenía una deuda con el mar», que de alguna forma siempre estuvo presente en sus obras y llegó el momento de saldar esa deuda dedicándole el espacio que se merecía. Las posibilidades narrativas y sensoriales del mar parecen infinitas, García Teijeiro explica que «abre la puerta a sensaciones, a vivencias» porque el mar «tiene muchas caras». La importancia del mar en su obra es fundamental ya que asegura que sin él su obra «no sería la misma». Su atracción ya viene de lejos: «Desde niño lo tengo muy presente; soy de Vigo y estoy acostumbrado a él», cuenta.
Pese a todo, en lo que a literatura se refiere, fue Rafael Alberti quien le descubrió sus posibilidades literarias con su libro «Marinero en tierra». García Teijeiro cuenta que fue Alberti quien lo animó a escribir. A este se suma también Martín Códax y sus «cantigas», que también ejercieron una gran influencia en el autor, que tiene como premisa «extender lo personal a lo universal» cuando se trata de elaborar una obra.
«Poemar o mar» forma parte de una trilogía «cerrada» que se completa con «En la cuna del mar» y «Palabras do mar» y no será ampliada, puesto que el autor asegura finalizar con ella una cuenta pendiente. La obra ganadora lo logró «por ser un libro cargado de emoción, con una brillante elección léxica, donde el mar es el gran protagonista, poblado de criaturas que transitan por originales y sugerentes composiciones poéticas», explicó el Jurado.
Pese a a que no planea ampliar esta colección, García Teijeiro tiene nuevos proyectos en mente. Del mismo modo que ocurrió con el mar, tiene deudas con otros autores, como García Lorca, para crear inspirar sus nuevos trabajos.
Además de su amplia trayectoria literaria, su otra gran dedicación es a la promoción de la lectura. Entre sus actividades se encuentran cursos de animación a la lectura, creación literaria o talleres de poesía.
