Una joven se protege de las fuertes lluvias registradas en la Comunidad
Una joven se protege de las fuertes lluvias registradas en la Comunidad - EFE

El desprendimiento de la cubierta de Riazor obliga a suspender el encuentro Depor-Betis

Cortado el tráfico ferroviario entre Orense y Vigo por el fuerte temporal que azota Galicia

Santiago Actualizado: Guardar
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Los efectos colaterales del temporal se están dejando notar en Galicia a medida que pasan las horas. Muchos colegios se han visto obligados a suspender las clases al no poder garantizar la seguridad de los alumnos y el tráfico ferroviario entre Orense y Vigo se mantiene cortado con importantes retrasos en la red en general. La circulación quedó aplazada a las 7.25 horas, diez minutos después de que la caída de un árbol en la vía del tren Alvia entre Ferrol y Madrid obligase a retroceder al convoy hasta el municipio coruñés de Neda.

En La Coruña, el fuerte viento registrado esta madrugada ha provocado el desprendimiento de parte de la cubierta del estadio de Riazor, además de otras incidencias como caída de árboles y vallas.

En concreto, parte de la estructura del estadio ha volado debido al viento, afectando a la cubierta de pabellón y parte de maratón, han precisado desde el club coruñés, que se ha visto obligado a suspender finalmente el encuentro que enfrenta este viernes al Deportivo y al Betis.

Desprendimientos de muros y fachadas

En Lugo se registró una aparatosa caída de un muro en pleno centro de la ciudad, en la misma Plaza de Bretaña, que se desplomó sobre la acera y provocó importantes desperfectos en un vehículo que estaba estacionado al final de la calle Galicia.

Aunque el solar en el que estaba el citado muro se encontraba vallado por un cierre de la constructora propietaria, la caída de los cascotes provocó que también se viniesen abajo las planchas metálicas, que se desplomaron sobre la acera, justo en el lugar en el que la calle Galicia entronca con la Plaza de Bretaña, donde está la sede de la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo.

Vista de los desperfectos causados por el viento en Lugo
Vista de los desperfectos causados por el viento en Lugo - EFE

La comarca de Vigo es otra de las grandes afectadas por árboles caídos, desprendimientos en muros y fachadas, cortes de luz y otros percances.

Más de una docena de árboles han caído en diferentes puntos de la ciudad, como Ramón Nieto, Arquitecto Palacios, Falperra o en la VG-20; también se han desprendido ramas en García Barbón, Coia, Clara Campoamor, Ricardo Mella, Avenida de Madrid o García Barbón.

El viento ha causado también desprendimientos en cierres de fincas, canalones y chapas de tejados, entre otros. En la Avenida de Madrid, la caída de una valla publicitaria obligó a cortar momentáneamente un carril de circulación; y también hubo problemas en otras calles por caídas de árboles o desplazamiento de contenedores, como en la Subida á Madroa o en la carretera de Bembrive.

Del mismo modo, los bomberos tuvieron que limpiar en Pi y Margall restos de cristales que se habían desprendido de una fachada y, desde primera hora de la mañana de este viernes, están actuando en el número 39 de la calle Pizarro, por la caída de ladrillos y cascotes a la vía pública. Allí, se ha cortado el carril bus para garantizar la seguridad y permitir la labor de los servicios de emergencia.

Por su parte, el Ayuntamiento de Orense ha procedido a cerrar los parques de San Lázaro, de O Barbaña, de Quintela, de A Zapatilla, Praza da Marina, Xardín do Posío y Alameda para evitar daños sobre las personas debido al temporal de viento y lluvia que afecta a Galicia. El Consistorio ha adoptado esta decisión en base a las recomendaciones de la Dirección General de Emergencias y del Servicio de Bomberos por el nivel de alerta por rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora.

Un marinero cose las redes en Celeiro, cerca de Viveiro, bajo la intensa lluvia
Un marinero cose las redes en Celeiro, cerca de Viveiro, bajo la intensa lluvia - EFE

Flota amarrada

La flota gallega permanece amarrada a puerto de nuevo este viernes por riesgo extremo de oleaje, las provincias de Lugo, La Coruña y Pontevedra están en alerta roja.

En concreto, en puntos de la costa coruñesa como Ares la flota lleva amarrada toda la semana; y en zonas del litoral pontevedrés como Baiona los barcos permanecen en puerto desde el jueves y en A Guarda toda una semana, según han comentado las mismas fuentes.

También en la provincia de Lugo la flota se que quedado de nuevo, como en la jornada del jueves, sin faenar en zonas como Burela y Celeiro debido al temporal en el mar.

Desde Protección Civil se ha recomendado que ante vientos de intensidad fuerte en la costa hay que procurar alejarse de la playa y de otros lugares bajos que puedan ser afectados por las elevadas mareas y oleajes.

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