Henry Carmona durante la vista oral en la Audiencia Provincial de Pontevedra
Henry Carmona durante la vista oral en la Audiencia Provincial de Pontevedra - EF

Acepta una condena de 35 años por secuestrar y abusar de su mujer y de su hija

Henry Carmona ha admitido los hechos que se le atribuyen por las agresiones hacia su mujer e hija

Santiago Actualizado: Guardar
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El procesado por amenazar, secuestrar y abusar de su esposa y de su hija, Henry Carmona, ha aceptado una condena de 35 años de cárcel por los hechos que se le atribuyen. El acusado ha reconocido ante el tribunal que entró sin permiso en el que había sido el domicilio familiar donde, con la ayuda de otras dos personas, maniató y amenazó durante horas a su hija y a su esposa, de quienes también abusó sexualmente. Carmona ha intentado justificar sus actos explicando que «Estas son cosas que suceden de lo mal que uno lo pasa cuando queda sin trabajo». «Me arrepiento mucho», ha añadido ante el tribunal. El acusado ha llegado a un acuerdo con el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, durante el transcurso del juicio después de romper de manera inesperada el que ya habían alcanzado inicialmente.

En su declaración durante la vista oral, Carmona negó haber abusado sexualmente de su mujer y de su hija menor, pero admitió que incumplió la orden de alejamiento y, acompañado de dos hombres armados, entró en el domicilio de su expareja en el centro de Vigo. Además, ha negado que las hubiese golpeado y amenazado con explotar una bombona de butano a la que cortó la goma. Sin embargo, el testimonio de su exmujer resultó determinante en el desarrollo del juicio. En su declaración por videoconferencia ratificó su denuncia y relató la tortura a la que fueron sometidas por el procesado el 19 de enero de 2015. «Para mí han sido los tres años más duros de mi vida», ha señalado la mujer antes de explicar a la Sala su versión de los hechos que ha «intentado olvidar». Según dijo, cuando llegó a su casa aquel día la estaban esperando su marido y dos desconocidos.

Al igual que habían hecho previamente con su hija, a ella también la maniataron para dejarla encima de su cama, cada una en una habitación distinta. Según ha relatado, Henry Carmona la «quiso asfixiar». «Poniéndome un trapo en la boca y tapándome la nariz», ha explicado. Además, dijo que le «pinchó» con un cuchillo y la agredió. «Llenándome la cara y el cuerpo de moratones», ha afirmado entre lágrimas.

Abusos sexuales

La víctima ha relatado que luego la obligó a practicar sexo. De las agresiones sexuales que también sufrió su hija la madre ha asegurado que no supo nada hasta que escuchó a la menor relatando lo ocurrido a la forense. «No creía que esta persona nos odiase de esta manera para hacernos tanto daño a mi hija y a mí», ha explicado a las magistradas. «Eran sentimientos encontrados porque él es el padre de mi hija», ha apuntado.

Asimismo, ha relatado que el condenado llegó a manipular la bombona de una estufa a la que cortó la goma. «Encendía el mechero intentando que estallara toda la casa con nosotros dentro», ha sostenido la mujer. Luego lograron tranquilizarlo, según ha añadido, y su hija aprovechó un despiste para pedir por Instagram a un amigo que alertase a la Policía Nacional, que se personó en la vivienda y le detuvieron.

Reconoce los hechos

Tras escuchar esta declaración, el acusado sí reconoció los hechos y asumió la pena de 35 años que le planteó el fiscal. Por dos delitos de detención ilegal piden cinco años y seis meses de prisión y cuatro años por el otro. Mientras, por los dos delitos de agresión sexual pide 12 años y 13 años y seis meses. Por maltrato, solicita 57 días de trabajos en beneficio de la comunidad.

La Fiscalía solicita una indemnización de 41.200 euros por las secuelas y las lesiones que le causó a ambas mujeres, junto con la pena de cárcel. El fiscal pedirá también que, una vez salga de prisión, esté 20 años en libertad vigilada y que se decrete una nueva orden de alejamiento con respecto a las dos víctimas, como mínimo por un período superior en tiempo de diez años a la pena de cárcel que se le imponga. El tribunal dictará sentencia en los mismos términos acordados en la conformidad tras el acuerdo alcanzado por el procesado y la Fiscalía.

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