Una marca de ropa reciclada acuerda con pescadores valencianos la recogida de residuos plásticos

La compañía de moda sostenible Ecoalf ha alcanzado un acuerdo con cofradías de pescadores del litoral valenciano para recuperar residuos plásticos del fondo marino y convertirlos en hilo para confeccionar prendas de ropa. Javier Goyeneche, presidente ejecutivo de esta compañía con presencia en grandes almacenes de todo el mundo, avanzó los primeros detalles de este proyecto durante su reciente visita a la capital del Turia, donde han comenzado a comercializarse sus productos.

Según este acuerdo, los pescadores percibirán una retribución a cambio de recoger durante su faena diaria este tipo de basura, que actualmente se vuelve a tirar al mar. “Nosotros después separaremos el plástico PET para crear prendas con propiedades técnicas muy específicas”. El empresario madrileño considera que la basura abandonada a su suerte en los océanos es un problema de gran dimensión del que nadie se hace responsable, a pesar de que ”los estudios demuestran que estamos al borde de una catástrofe medioambiental”.

Era cuestión de tiempo que la moda viera una oportunidad de negocio en la creciente preocupación por el calentamiento global. “La gente quiere marcas en las que creer, marcas comprometidas que nos hagan sentir que formamos parte de una historia”, explica a ABC este experto en marketing.

“El problema fue que cuando salimos al mercado a buscar materiales reciclados nos encontramos una oferta muy escasa y de muy baja calidad. La poca cantidad de tejidos existentes sólo estaban reciclados en un porcentaje muy pequeño (15-20%). Por eso comprendimos la necesidad de realizar alianzas e invertir en procesos de innovación para desarrollar tejidos, forros, cintas, etiquetas, cordones con materiales reciclados.

En estos momentos la compañía tiene más de setenta tejidos reciclados con texturas diferentes, desde lanas recicladas a neoprenos, y mantiene doce alianzas activas por todo el mundo para recoger residuos.

350 euros por abrigo

El plástico de politereftalato de etileno (PET), uno de los más empleados para fabricar envases, es uno de los secretos del éxito de esta compañía, creada en 2009 por el fundador de la marca de bolsos y accesorios Fun&Basics. Para que nos hagamos una idea, se necesitan unas 70 botellas usadas para confeccionar un metro cuadrado de tejido. Hasta el momento, se han fabricado más de 150.000 metros, lo que arroja un cálculo de más de 10,5 millones de botellas recicladas.

Además del plástico, en la composición de estas prendas podríamos encontrar restos de redes de pesca viejas de poliamida, café post-consumo, lana y algodón post-industrial, neumáticos viejos, etc.

La pregunta del millón es: ¿vestirse con conciencia ecológica –y con un buen diseño y acabados de alta calidad- es asequible para todos los bolsillos? Lo cierto es que no. Por poner dos ejemplos, una americana reversible de hombre ronda los 275 euros, y un abrigo técnico cuesta cerca de 350 euros. De hecho, en Valencia estas prendas se comercializan exclusivamente en Hannover 1998, un establecimiento de moda masculina de gama alta.

A pesar de los precios, Ecoalf está triunfando en un sector, el de la moda reciclada, donde otros no han tenido tanta fortuna. La clave, en palabras de su presidente, la “inversión constante” en I+D+i y no dejar de lado el diseño. (En otras palabras, sentir que ayudas a cuidar el planeta está muy bien, pero mucho mejor si además de “eco-friendly” soy un dechado de elegancia).