Albert Rivera, durante un mitin en Valencia junto a Toni Cantó, Carolina Punset, Marta Martín, Vicente Ten y Fernando Giner
Albert Rivera, durante un mitin en Valencia junto a Toni Cantó, Carolina Punset, Marta Martín, Vicente Ten y Fernando Giner - EFE
Política

La caída de Alexis Marí deja en el aire los liderazgos de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana

La formación señalará a Fernando Giner y a Toni Cantó como los hombres fuertes en el territorio con vistas a las elecciones de 2019, mientras el grupo parlamentario podría acabar con una arriesgada imagen de ruptura

VALENCIA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Las continuas discrepancias de Alexis Marí con la dirección nacional de Ciudadanos (la última por mostrarse contrario a los Presupuestos de Mariano Rajoy) han acabado en una fulminante destitución como portavoz en las Cortes Valencianas. El secretario general del partido, José Manuel Villegas, confirmaba este lunes el relevo, tal como se venía apuntando en los últimos días.

La decisión, justificó, se toma ahora formalmente pero «deriva y es consecuencia del último congreso» y se trata de «una cuestión de confianza». Uno de los objetivos, destacó, es «buscar una mayor cohesión tanto a nivel institucional como orgánico». Villegas reconocía, además, que el partido tiene que corregir su rumbo y su proyección en la Comunidad Valenciana ante la «falta de estrategia clara y entendible por los ciudadanos».

Ambas cuestiones a las que apuntaba, unidad y liderazgo, son precisamente los retos a los que se enfrenta el partido en un territorio donde el proyecto no ha cuajado de forma tan evidente como se preveía.

La primera de ellas se antoja complicada pese a que la dirección evita verbalizar su temor. El grupo parlamentario se encuentra dividido casi por la mitad en dos sectores. Las diferentes visiones sobre posicionamientos políticos o internos -además de escasas sintonías personales- han ido partiendo a la formación en la Cámara que, pese a algún sobresalto, ha podido mantener la convivencia al menos de forma aparente.

Por una parte, se encuentran los diputados afines a Alexis Marí. Entre ellos, su jefe de gabinete, David de Miguel, además de Toni Woodward, Alberto García y Domingo Rojo. Al otro lado pertenecen los más cercanos a aquellos que cuentan con el porder orgánico, liderados por Emilio Argüeso, Emigdio Tormo y Juan Córdoba (ideológicamente más conservadores). Les siguen Mari Carmen Sánchez -nueva síndica-, Rosa García o Mercedes Ventura.

Durante el primer amago de Ciudadanos de expulsar a Marí como portavoz cuando se posicionó contra la estrategia de la Ejecutiva junto a Carolina Punset por virar «a la derecha», los parlamentarios más próximos a él ya estudiaron la posibilidad de pasar a ser no adscritos. Una situación que se repite de nuevo tras su relevo y que podría acabar con una arriesgada imagen de ruptura absoluta a medio plazo ante a los dos años que todavía restan de legislatura.

Todos ellos fueron convocados este lunes en la sede valenciana por Villegas y por el secretario de Organización, Fran Hervías, a una reunión con ausencias como la del propio Marí. En ella se les trasladó oficialmente la decisión del cambio en la portavocía y la necesidad de que existiera cohesión en el grupo parlamentario para trabajar conjuntamente sin posturas cambiantes de forma constante.

Algunos de los parlamentarios críticos aprovecharon para mostrar su disconformidad con el nombramiento de Juan Córdoba como portavoz adjunto tras el escándalo de las grabaciones que realizó en su despacho al diputado del PP José Císcar. Según fuentes del partido, la segunda portavocía adjunta ha sido ofrecida a David de Miguel, pero éste la ha rechazado.

A Mari Carmen Sánchez le espera una tarea casi imposible -aunque se trata de una persona de la confianza de Fernando Giner- debido es esa fractura. Desde la dirección nacional por una parte se indica que habrá que apoyarla mucho en los primeros compases, pero otras fuentes son más optimistas y la definen como «la mejor opción posible» y como un perfil «nada conflictivo y que mantiene buenas relaciones con todo el mundo».

Búsqueda de líderes: Toni Cantó, a la palestra

A todo ello se une la misión de recomponer el liderazgo en la Comunidad Valenciana. Con el principal referente institucional e interlocutor con el actual Gobierno autonómico apartado, el partido tendrá que buscar una nueva figura con vistas a las elecciones de 2019.

Los primeros movimientos del partido en esta dirección podrán vislumbrarse en el proceso de reconstrucción de los Comités Autonómicos las próximas semanas. Casi con toda seguridad se ratificará como portavoz a Fernando Giner, el hombre fuerte de Albert Rivera en el territorio, y en él entrará también el diputado nacional Toni Cantó.

Precisamente a este último apuntan fuentes de la formación como la figura que Ciudadanos tratará de potenciar de cara a los comicios, pese a que todavía sea muy pronto para lanzarlo a la carrera. De hecho, ha multiplicado durante los últimos meses su presencia en la Comunidad con diversos actos con afiliados los fines de semana.

Quién ocupará los primeros puestos de la lista autonómica y local (Cantó o Giner) se decidirá más adelante. Además, el partido también quiere comprobar cómo funciona la nueva síndica en las Cortes, Mari Carmen Sánchez.

Todo está muy abierto de cara a 2019. Ciudadanos coquetea con la idea de poder entrar en el Gobierno tanto en la Generalitat como en las tres capitales de provincia. En la cúpula todavía no tienen claro cómo resolver la ecuación. Giner es clave para el partido y, pese a que al ocupar concejalía en el Ayuntamiento lo lógico sería que repitiese como candidato municipal, no está en absoluto descartado que pueda ser el de la Generalitat. Aunque a estas alturas el ticket electoral más probable sería el que mantuviese a Giner en el Consistorio y colocar a Cantó a librar la batalla autonómica. Aun así, en la dirección nacional «tampoco interesa» resolver tan pronto esta ecuación.

La Comunidad Valenciana es uno de los territorios en los que los estrategas de Ciudadanos consideran que tienen un mayor potencial de crecimiento. Pero lo cierto es que la convulsión interna, de la que nunca se ha librado el partido, ha lastrado su desarrollo. La cohesión interna es el principal objetivo de la nueva etapa, pero todo va a depender del rol de Marí y su mujer, la eurodiputada Carolina Punset, pero también de la respuesta que adopte la dirección nacional. Ayer manifestaban que esperan que ni Marí ni sus afines se pasen al grupo de los no adscritos.

Ver los comentarios