Alfonso Rus, imputadoImelsa pagaba el sueldo a personas que no trabajaban en la empresa pública

El juez encargado del caso Imelsa, Víctor Gómez, ha levantado parcialmente el secreto de sumario y ha abierto una pieza separada de la causa principal en la que investiga las contrataciones ficticias (por las que los trabajadores percibían un sueldo sin desempeñar actividad laboral alguna) que, supuestamente, se realizaron en la Diputación de Valencia.

Dentro de ésta, el magistrado ha imputado al expresidente de la corporación, Alfonso Rus, y a otras 27 personas por prevaricación, malversación, fraude en la contratación, tráfico de influencias y falsedad. Entre ellas, también se encuentran su jefe de gabinete, Emilio Llopis; el exgerente de Imelsa, Marcos Benavent; el exdirector financiero de dicha sociedad y la que fuera jefa de recursos humanos de la misma, por sus atribuciones para llevar a cabo las contrataciones.

Además de los quince investigados que cobraban sin trabajar, entre los que se cuentan políticos y expolíticos locales, el juzgado investiga a otros ocho contratados por Imelsa por las indemnizaciones que percibieron al extinguirse su vínculo laboral con la empresa pública.

Para el instructor existen sospechas de que pudiera haber existido algún tipo de «maquinación concertada» entre la empresa y algunos trabajadores para que cobraran elevadas indemnizaciones que podrían haber supuesto un «innecesario y arbitrario enriquecimiento».

El juez imputa igualmente a José Adolfo Vedri, responsable de la empresa de comunicación Engloba por su participación en la supuesta contratación fraudulenta de dos de sus trabajadores cuyo sueldo costeaba Imelsa. Esta misma modalidad de contratación se daba, supuestamente, con un jugador del Olímpic de Xàtiva, equipo de fútbol presidido por Rus.

Esta nueva pieza se tramitará de manera independiente a la principal, que investiga el supuesto amaño de contratos a cambio de comisiones ilegales en varias administraciones públicas y en la que hay 115 imputados.